Carta de un taxista: “Mi mujer y yo sí que nos hemos quedado atrás, señor Presidente”
Francisco Javier García.- Tengo 57 años y llevo trabajando desde los 20. Soy autónomo, taxista, y siempre he cumplido con mis obligaciones tributarias como la mayoria de los contribuyentes. Estoy casado con otra taxista autónoma, por lo que el taxi es nuestra forma de vida.
Lo cierto es que cuando empezó todo esto del coronavirus y oí la TV a nuestro Presidente, me tranquilizó bastante, pues dijo las palabras mágicas “nadie se va a quedar atrás”.
Con el tiempo me di cuenta de que se refería a que los autónomos a los que se les obligaba a cerrar ya cobrarían más adelante, cuando se pudiera, pero que de momento habría que cumplir con todos los gastos, que llegarían como si no hubiese pasado nada. Y que, para los autónomos que aún podíamos trabajar, aunque esto signifique que el ingreso sea del 10 por ciento de lo que ganábamos en situación normal, no teníamos derecho a nada, solo a pagar impuestos y demas arbitrios.
Pues bien, mi mujer y yo sí que nos hemos quedado atrás, porque con ingresos bajísimos y los mismos gastos que antes es muy difícil salir adelante, y poco se hace con dar créditos para pagar los impuestos, pues los intereses hay que pagarlos y uno se ahoga más todavía.
Se supone que el Estado, ante situaciones excepcionales, tendría que tomar medidas excepcionales. Pues yo creo, señor Presidente, que va a haber millones de personas que se queden muy, muy atrás, y que vamos a volver a los años cincuenta.
* Francisco Javier García Gutiérrez es taxista y vive en La Coruña.