La llegada de inmigrantes a nuestro país desde el continente africano ha descendido notablemente durante este año.

Mientras que en el 2018 llegaron unas 62.000 personas, este año la cifra se ha reducido a 30.000. Esto quiere decir que se ha producido un descenso superior al 50% en la llegada de inmigrantes y embarcaciones ilegales a nuestras costas.

Los controles en el Estrecho y en el Mar de Alborán han obligado a las mafias que mueven a los inmigrantes a cambiar de ruta. Ahora, se desvían hacia las Islas Canarias.

Canarias es el único lugar donde ha crecido notablemente la llegada de embarcaciones. La inmigración irregular ha crecido un 90% en el último año, una cifra que podría llegar a duplicarse.

Se trata de la ruta más peligrosa, tanto por la cantidad de kilómetros que tienen que cubrir como por las corrientes que tienen que atravesar.

Se estima que solo en 2019, llegaron hasta las islas unas 2.500 personas. El dato es preocupante, ya que suponen más del 70% de las llegadas del año pasado.

Solo durante la última semana se estima que han llegado a las islas cerca de 400 personas. Muchos de ellos menores y bebés.