La Policía Nacional ha informado este miércoles de la detención en Palma de una pareja de ciudadanos guineanos y de religión musulmana por, presuntamente, maltratar a sus dos hijos mayores, un niño de 14 años y una niña de 15 años, que habrían sido azotados en diversas ocasiones, con un cinturón y con el cable del cargador del teléfono móvil. Según explicó la menor a los investigadores, uno de los motivos por los que su padre la golpeaba era porque se negaba a llevar el velo islámico.

El posible maltrato de los dos adolescentes fue descubierto en el centro educativo en el que estudian, ya que sus profesores observaron marcas en sus cuerpos que podrían ser compatibles con posibles agresiones. El siguiente paso fue informar del caso al Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), organismo que depende del Consell de Mallorca. Los técnicos del IMAS comprobaron que ambos niños podrían haber sufrido efectivamente malos tratos, en especial por parte del padre, de 52 años de edad.

Además, los facultativos de un centro de salud palmesano confirmaron la hipótesis de posibles agresiones en el ámbito familiar.

El caso pasó entonces a la Unidad de Familia y Mujer (Ufam) de la Policía Nacional, que se ocupó de proseguir la investigación. Las dos víctimas explicaron a los agentes, por separado, que sufrían castigos físicos por diversos motivos, por ejemplo por no saludar al llegar a casa o por haber perdido alguna prenda. Como se ha indicado, la menor también indicó que era castigada por negarse a portar el velo islámico o por no querer vestir prendas tradicionales de su país.

Retirada de la custodia

La adolescente también refirió a los investigadores que, al parecer, sus padres habrían acordado ya una boda a la fuerza en Guinea, que de no haberse impedido habría tenido lugar en un próximo viaje al citado país africano.

Según los testimonios de ambos menores, los mencionados castigos habrían sido efectuados sobre todo por el padre, si bien la madre —de 48 años— les habría dado bofetones en alguna ocasión. El citado matrimonio tiene otros dos hijos pequeños, que al parecer también habrían sufrido malos tratos.

La Policía Nacional arrestó el lunes a la pareja, como presunta autora de un delito continuado de malos tratos. Los sospechosos quedaron en libertad con cargos tras haber comparecido para prestar declaración. A la espera de que vayan próximamente a juicio, se les ha retirado cautelarmente la custodia de sus cuatro hijos, que serán atendidos a partir de ahora por el Consell de Mallorca.

(ABC)