El Gobierno renuncia a la casilla lingüística para reforzar el castellano en Cataluña
«Tubo» –en lugar de «tuvo»–, «complir» en vez de «cumplir» o «classe» por «clase».

Son faltas de ortografía, en su mayoría influencia del catalán, que podrían aceptarse si las hubiera cometido un alumno principiante, pero son «inaceptables» y «preocupantes» si aparecen en un documento oficial firmado por un alto cargo de la consejería catalana de Educación, según denuncia la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB).

Los gazapos aparecen en un comunicado oficial, con sello del departamento de Enseñanza de la Generalitat y firmado por la responsable territorial del Baix Llobregat. La administración autonómica responde a una queja presentada por un grupo de familias de la Escuela Guinovart de Castelldefels (Barcelona) en 2017. La queja está relacionada con la actuación del centro respecto a la orden del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) de impartir el 25 por ciento de las clases en castellano a varios alumnos del centro.

En el texto, la responsable educativa en la zona arguye cómo el departamento ha dado respuesta a la orden de la justicia y aparecen «graves faltas de ortografía, fruto de la falta de dominio del castellano», según denuncia en declaraciones a este medio la presidenta de la AEB, Ana Losada. Entre los errores ortográficos detectados destaca el uso del verbo «tubo», en lugar de «tuvo», y un «sinfín de erratas», producto, en su mayoría, de la influencia del catalán.

«Catalanadas»

La AEB señala entre otras «catalanadas»: «Classe», «complir», «dictades», «convivència» o «paper»; que aparecen en el texto en lugar de «clase», «cumplir», «dictadas», «convivencia» y «papel».

«El hecho de que hasta los propios responsables del departamento, que están enseñando a nuestros hijos, cometan faltas tan injustificables demuestra lo que llevamos años denunciando; que el nivel de dominio del castellano en Cataluña es bajo», señala Losada quien considera que las faltas detectadas «dan auténtica vergüenza ajena». «Si los profesores tienen tan poco dominio del castellano, imaginad los alumnos», añade la líder de la AEB.

La entidad está analizando los proyectos lingüísticos de los más de 2.000 centros educativos catalanes para comprobar si, tal como afirma la Generalitat desde hace años, los colegios con alumnado en su mayoría catalanohablante refuerzan el uso del castellano en sus currículos.

(ABC)