Geldermalsen, la Fuenteovejuna holandesa
(El blog del oso solitario).- Los lectores que pertenezcan a la generación nacida en los setenta o anteriores comprenderán sin duda la referencia a Fuenteovejuna, porque seguramente habrán estudiado esta obra en el colegio, como se estudiaban muchos otros clásicos, la historia y la cultura española, en vez de estupideces políticamente correctas. Entre los más jóvenes quizá algunos no lo sepan y es oportuno algún comentario. De pasada recomiendo su lectura, que será de provecho. (VER VIDEO)
Fuenteovejuna es una obra de teatro del Siglo de Oro, escrita por Lope de Vega. Tiene por tema la rebelión de un pueblo entero contra los abusos y los atropellos del poder. Está basada en un hecho real sucedido en el siglo XV. En palabras del cronista Sebastián de Covarrubias:
Los de Fuente Ovejuna, una noche del mes de abril de mil y quatrocientos y setenta y seis, se apellidaron para dar la muerte a Hernán Pérez de Guzmán, Comendador Mayor de Calatrava, por los muchos agravios que pretendían averles hecho. Y entrando en su misma casa le mataron a pedradas, y aunque sobre el caso fueron embiados juezes pesquisidores que atormentaron a muchos dellos, assí hombres como mugeres, no les pudieron sacar otra palabra más désta: «Fuente Ovejuna lo hizo»
¿Qué tiene que ver Fuenteovejuna con Holanda? ¿Por qué, dónde y cuándo la Fuenteovejuna holandesa?
El porqué de la referencia a la obra de Lope de Vega quedará claro dentro de poco. La Fuenteovejuna holandesa se llama Geldermalsen y la fecha es el 16 de diciembre del presente año, 2015. Frente a la decisión de construir un centro de acogida para “refugiados” y aceptar 1.500 de ellos, mientras se estaba debatiendo el tema en el Ayuntamiento una manifestación de protesta de 2.000 personas se convirtió rápidamente en una revuelta en toda regla, un violento motín que obligó a desalojar la sala donde los políticos estaban formalizando su decisión, una decisión tomada sin haber consultado a los habitantes del pueblo y contra su mayoritaria voluntad.
No tiene pérdida el vídeo que muestra a los gobernantes “democráticos” en la sala del Ayuntamiento, mientras consuman la traición a su pueblo; primero preocupados frente a la creciente algarada fuera del edificio (expresiones inquietas, crecientes ruidos del exterior… ¿será suficiente el cordón de antidisturbios que nos defiende de los ciudadanos a los que “representamos”? parecen preguntarse) para luego salir corriendo cuando las cosas se pusieron feas. Dejo a los lectores gozar con las imágenes:
Las reacciones escandalizadas de la corrección política, de los enemigos de Europa y sus traidores a sueldo, no se han hecho esperar. “Inaceptable” suceso donde los revoltosos son “Anti-holandeses” según los políticos del país.
No señores. Los manifestantes eran holandeses que aman a su país y se preocupan por su futuro, no quieren que su pueblo desaparezca, no quieren la degradación social que conlleva la invasión inmigratoria salvaje y no aceptan que los enemigos de Holanda y Europa les impongan estas decisiones. Ellos son los holandeses verdaderos. Los verdaderos anti-holandeses y anti-europeos son los políticos traidores, sus juntaletras subvencionados, la chusma repugnante de las varias tribus malolientes de la extrema izquierda, que se manifiestan a la menor ocasión por la desaparición de los pueblos de Europa, haciendo gala de un odio cada vez más explícito contra los europeos autóctonos.
Se comprende también la calificación de inaceptables que los políticos anti-holandeses han dado de los disturbios: es inaceptable que los holandeses, cuya opinión es ignorada sistemáticamente, hagan sentir su voz; es inaceptable que no acepten el destino que ha sido decidido sobre sus cabezas por sus enemigos; es inaceptable que no quieran comerse el pastel envenenado que ha sido cocinado para ellos y se lo arrojen en la cara al cocinero.
La revuelta de Geldermalsen es un amago de insurrección genuina, popular, donde la gente del lugar se ha rebelado con toda justicia y legitimidad. No debería ser necesario llegar a esto, naturalmente. Debería ser posible cambiar las cosas pacíficamente, democráticamente, a través de partidos políticos que reflejaran la verdadera opinión de los europeos y llevaran a cabo políticas consecuentes con ésta.
Pero cuando los gobernantes traicionan a los gobernados, cuando ignoran su opinión y el sistema democrático se convierte en una farsa que sirve sólo a transmitir decisiones tomadas por poderes en la sombra, cuando las cartas están trucadas y se bloquea el camino a quienes realmente interpretan la voluntad de los europeos, entonces, la insurrección no sólo es lícita, justa y legítima, sino un deber cívico y moral, del más alto significado ético, en nombre de nuestra identidad y del futuro de nuestros hijos.
Terminaré citando los versos de Lope de Vega:
Haciendo averiguación
del cometido delito,
una hoja no se ha escrito
que sea en comprobación;
porque, conformes a una,
con un valeroso pecho,
en pidiendo quién lo ha hecho
responden: Fuenteovejuna
Cuando los europeos se despierten, si no les dejan cambiar las cosas por las buenas, democráticamente y siguiendo las reglas, lo harán por las malas. Decenas, cientos, miles de Fuenteovejunas a lo largo de toda Europa, que surgirán como los brotes de la primavera, serán el preludio de la gran ola que barrerá a los enemigos de Europa. Y cuando los esbirros y los inquisidores de Anti-Europa busquen a los “culpables” se encontrarán con una sola respuesta:
Llegará un día que esto se extenderá como la pólvora por toda Europa. Será la hora de la libertad y de sacudirnos el yugo del sionismo y la masonería. Será la hora de ajustar cuentas con los que tanto daño han hecho a nuestra raza, nuestra cultura y nuestras tradiciones. Será la hora de vengar a los cien mil inocentes que cada año son asesinados tan solo en España en nombre de la libertad, la igualdad y la fraternidad. En nombre del…. ¿progreso? Llegará la hora. Como le llega su San Martín a todo cerdo, éstos políticos lacayos del mal… Leer más »
Aquí un vídeo de lo mismo.
No entiendo “una mierda” de Holandés, pero sólo con ver a “las ratas” salir del pleno del ayuntamiento (o como se llame en Holanda), vale la visión de la “noticia”.
Me parece que en MUCHOS países de Europa, a la gente se le están empezando a hinchar las pelotas.
https://youtu.be/3n5xmxBg8P0