AQ.- Un alto ejecutivo de una muy y muy conocida marca de cava catalana – costaría encontrar alguien que ignorara su nombre – me dice: “En el periodo navideño, nuestras ventas al resto del Estado han caído en picado, sobre todo en cuanto a las compras por parte de empresas. Pero también, aunque menos, de particulares. Las fiestas no han acabado del todo, si bien ya podemos hablar de desastre. Sin duda el gran factor ha sido el enfrentamiento político”.

El sector del cava catalán no solamente es importante económicamente sino también emblemático. En esta ocasión no parece que haya habido ninguna campaña organizada contra el cava catalán, sino un movimiento espontáneo, de auténtico cansancio en todo España por las salidas de tono, sin precedentes, de políticos catalanes independentistas.

Datos concretos en pocas semanas

“Dentro de pocas semanas habrán datos concretos” dice la fuente, la cual agrega: “Antes de que pasara expresamos nuestra preocupación a la Generalitat, que no nos hizo ningún caso, ni siquiera tuvimos la sensación de que nos escuchara. Con anteriores gobiernos, tanto de CiU cómo del PSC, en que nunca habíamos sido tan alarmados, ni tampoco había razón para estarlo demasiado, siempre habíamos tenido la sensación que nos escuchaban y que algo hacían. Como mínimo, atenuar las tensiones en estas fechas. Ahora no ha sido ni es así.”

Preguntado sobre el artículo de este diario sobre la creación de un frente empresarial contra Mas la fuente dijo que “lo leí, corrió por mi empresa y me consta que también por el sector. Había oído decir que había un movimiento del género expuesto, que considero justificado. En nuestro sector hay muchas personas que históricamente han ayudado y votado a CiU. Pero me consta que esto está cambiando. En cualquier caso, hace falta que también haya una alternativa interna a CDC. Personalmente, no soy de CDC, si bien la he votado más que a ningun otro partido. Ahora no votaría a Mas pero si a Recoder. No creo ser el único”.