El PP mendiga pactar con el PSOE (Video comentario de Joaquín Abad)
Las declaraciones de Esteban González Pons no son una opinión personal ni un exceso retórico de sobremesa radiofónica. Son la verbalización descarnada de una estrategia política que sitúa al Partido Popular fuera del mandato de las urnas y dentro del carril estrecho que marca Bruselas.
Cuando un dirigente de primer nivel afirma que no le incomoda pactar con el PSOE, lo que está haciendo no es tender puentes institucionales, sino admitir que el PP ha dejado de aspirar a gobernar con un proyecto propio y diferenciado.
El mensaje es inequívoco: antes que respetar el resultado electoral en Extremadura y asumir la aritmética parlamentaria que obliga a entenderse con Vox, se prefiere blanquear la gran coalición como fórmula natural de poder. No porque sea lo que han votado los ciudadanos, sino porque es lo que tranquiliza a los comisarios europeos, a los burócratas que detestan cualquier desviación del consenso ideológico dominante.
González Pons, cuyo hijo formaba parte de esa empresa de influencia del lobby gay socialista dirigida por Pepiño Blanco, habla como vicepresidente del Parlamento Europeo, no como dirigente de un partido que se debe a sus votantes en España.











