En defensa de los belenes: tradición, cultura y memoria compartida
Cada mes de diciembre, los belenes vuelven a ocupar escaparates, plazas, hogares y centros educativos. Sin embargo, en los últimos años su presencia ha generado debate, cuando no controversia. Defender los belenes no es solo una cuestión religiosa: es, ante todo, una defensa de la cultura, la historia y las tradiciones que han tejido nuestra identidad colectiva.
El belén es una manifestación artística popular con siglos de historia. Desde los elaborados nacimientos napolitanos hasta los sencillos montajes familiares, el belén combina artesanía, creatividad y transmisión intergeneracional del conocimiento. En torno a él se enseñan valores como la paciencia, el cuidado del detalle y el trabajo manual, hoy más necesarios que nunca en una sociedad acelerada y digitalizada.
Además, los belenes cumplen una función social y educativa. En muchos hogares, montar el belén es una actividad compartida entre generaciones, un momento de encuentro que fomenta el diálogo y el recuerdo. En las escuelas y espacios públicos, permiten explicar episodios históricos, costumbres locales y expresiones artísticas sin imponer creencias, sino ofreciendo contexto cultural.
Desde un punto de vista patrimonial, los belenes forman parte del legado inmaterial de numerosos países, especialmente en el ámbito mediterráneo y latinoamericano. Ferias, asociaciones belenistas y concursos mantienen viva una tradición que genera cohesión social y dinamiza la vida cultural de pueblos y ciudades durante la Navidad.
Defender los belenes no significa excluir ni imponer, sino reconocer que la pluralidad cultural se construye sumando, no borrando. Respetar esta tradición es compatible con una sociedad diversa y abierta, donde distintas sensibilidades conviven sin anularse mutuamente.
En definitiva, los belenes son mucho más que una escena navideña: son memoria, arte y convivencia. Preservarlos es apostar por una cultura que sabe de dónde viene y que, precisamente por eso, puede mirar al futuro con mayor riqueza y comprensión.











