Los Tercios de Flandes conquistan Sevilla
Manuel Recio Abad.- Los Tercios de Flandes fueron unidades militares emblemáticas del Imperio Español, destacándose entre los siglos XVI y XVII. Su formación, estrategias y victorias marcaron un hito en la historia militar de Europa y su legado perdura hasta hoy.
Los Tercios se formaron en la década de 1530 durante el reinado de Carlos V como respuesta a la necesidad de disponer de una infantería más moderna, versátil y efectiva. Combinaban en sus acciones a mosqueteros y piqueros en una formación en cuadrado, lo que les permitía adaptarse a diferentes tipos de combate. Eso les hacía temibles en los enfrentamientos cuerpo a cuerpo. Esta estructura les brindó una notable ventaja táctica en el campo de batalla, convirtiéndolos en una fuerza temida por sus adversarios.
Los Tercios participaron en numerosas batallas decisivas, como la Batalla de San Quintín (1557) y la Batalla de Rocroi (1643). Sin embargo, uno de los episodios más destacados de su historia es el conocido como Milagro de Empel. Ocurrió entre el 7 y el 8 de diciembre de 1585, en el contexto de la Guerra de los Ochenta Años. Un tercio del ejército español , bajo el mando del capitán Francisco de Lemos, se encontraba rodeado en la isla de Bommel por las fuerzas rebeldes holandesas.
Ante una inminente derrota, los soldados invocaron la protección de la Inmaculada Concepción, pintada en una tabla y que casualmente un soldado, cavando una trinchera, había encontrado enterrada en el barro. En un acto de fe, erigieron un altar improvisado y se comprometieron a luchar en su nombre. En la mañana del 8 de diciembre, se levantó un viento gélido del noreste que congeló en unas pocas horas las aguas del río Mozart. Los españoles, marchando sobre el hielo, lanzaron un ataque sorpresa que logró romper el cerco enemigo. La aplastante victoria fue considerada un milagro y consolidó la devoción de los Tercios hacia la Inmaculada.
El Milagro de Empel no solo fortaleció la moral de las tropas, sino que también estableció a la Inmaculada Concepción como patrona de los Tercios de Flandes e Italia. Este episodio se convirtió en un símbolo de la fe y la determinación de los soldados españoles y son ya siete años consecutivos los que la Asociación Tercio de Olivares creada por un grupo de amantes de la Historia de España, recrean un desfile perfecto en su indumentaria y armamento, rememorando los gloriosos tercios de aquella época. No olvidemos que los Tercios, aunque eventualmente perdieron su preeminencia militar, siguen siendo un símbolo del poderío español en Europa y de la rica historia militar de España.
Tras recorrer las principales calles del casco histórico de Sevilla, realizaron una ofrenda a la Inmaculada Concepción. Su capitán Fernando Pérez Colchero arengó a sus tropas y a todos los presentes, conquistando el corazón y el cariño de Sevilla un año más, mostrando con orgullo lo que nunca se debe olvidar: la grandeza de nuestra historia.











