Extremadura y la Complutense lo están pasando fatal
Luis Ventoso.- Vivimos en una subcultura clínex, donde todos somos un poco de usar y tirar y donde las máquinas van asumiendo tareas que parecían reservadas al intelecto de los seres humanos. Las prisas de la aceleración digital hacen además que enseguida nos aburramos de todo. Una consecuencia es que se ha comprobado que los profesionales duran mucho menos en sus puestos que en el siglo pasado. Lo cual es aplicable a los políticos, a los directivos y hasta a los entrenadores de fútbol.
Ya nadie parece imprescindible. Políticos que copaban titulares se ven envueltos en un instantáneo manto de olvido en cuanto dejan de pisar la alta moqueta pública (¿quién se acuerda de Sorayita, Ribera, Iglesias Turrión. Quim Torra…?).
Sin embargo, existen excepciones. Personas realmente irremplazables, hasta el extremo de que sin ellas se extingue toda una obra, con el consiguiente daño para el conjunto de la sociedad. Tal es el caso de lo que está ocurriendo en España con la transformación social competitiva, que languidece tras la retirada de la catedrática extraordinaria Begoña Gómez. Era una materia crucial, hasta el extremo de que media docena de enormes empresas españolas e incluso alguna multinacional digital estadounidense se apresuraron a aportar fondos para el estudio de esta trascendental disciplina. Pero tras la retirada de la lumbrera académica que puso el tema bajo el foco del interés empresarial, nadie ha vuelto a acordarse de la transformación social competitiva. Incluso se ha cerrado la cátedra extraordinaria que tanto urgía.
La Complutense, que gracias al fichaje de Gómez se había situado en la élite académica y ya se codeaba con Oxford, Cambridge y las universidades de la Ivy League, acusa el mazazo de la prematura retirada de la estudiosa. Es un desperdicio, algo así como si a comienzos del siglo XX, Cambridge hubiese renunciado a las contribuciones de Ramanujan, Wittgenstein, Russell, Popper, Keynes… No se entiende que la Complutense no recupere a la cúadruple imputada.
No menos lesivo es lo que está pasando con el bel canto en Extremadura. Bajo la batuta de David Sánchez Pérez-Castejón, conocido en las tablas como el Maestro Azagra, Badajoz se había convertido en una de las mecas de la ópera, rivalizando con el Met, la Scala, el Covent Garden y la Garnier de París. Lo ha explicado muy bien el candidato socialista extremeño Gallardo, procesado por enchufar al Maestro Azagra por orden de ya saben quién: «David Sánchez vino a generar riqueza musical con su talento».
Así es. El coautor de La danza de las chirimoyas presentó en Badajoz, en noviembre de 2022, el «estreno mundial» de una ópera contemporánea titulada La paz perpetua. Versaba sobre tres perros que quieren ingresar en la unidad canina antiterrorista. Apasionante. Se representó en una función única, que costó 128.000 euros regalados por las administraciones, incluidos fondos europeos aportados por Pedro, el hermano del maestro (para más señas, presidente del Gobierno). Fue todo un éxito: media entrada en el teatro pacense, a pesar de que las entradas se saldaban a diez euros. Se recaudaron en total unos dos mil con un coste de más de cien mil
El logro del David Sánchez como «generador de riqueza musical» en Badajoz presenta además el mérito añadido de que lo conseguía sin presentarse a trabajar y viviendo escondido para simular que estaba afincado en Portugal y así ser residente fiscal allí y pagar menos impuestos (en lugar de la sangría con que nos despluma su hermano mayor).
En resumen, la Complutense y Extremadura lo están pasando fatal y deben reponer a ambas eminencias. Y es que ya lo dice Pedro: «Son perfectamente inocentes». Por eso han desaparecido ambos del mapa y su augusto protector ha acometido todo tipo de maniobras perversas para acogotar a los jueces y evitarles el banquillo (donde toda la Famiglia va a sudar tinta, porque estamos ante dos casos de nepotismo de manual). Ay, como diría el sabio patriarca Sabiniano, ¿para qué meterse en estos líos con lo bien que iba la industria del vapor?











