La Asamblea de Madrid ha recordado este jueves con un minuto de silencio a la mujer de 60 años asesinada en Alpedrete el fin de semana pasado a manos, presuntamente, de su marido que posteriormente se suicidó.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha cargado contra el “proyecto actual que desgobierna España”, al asegurar que se sustenta sobre “un pacto corrupto, sin luz ni taquígrafos” que está consiguiendo que el país “se esté yendo por el sumidero”. Ayuso ha censurado que el proyecto actual que gobierna en España se sustente en un pacto que “llevó al líder del Partido Socialista con urnas de cartón entre (José Luis) Ábalos y Koldo (García)”, a lo que ha añadido que el Gobierno “no va a romper por más corrupción que esté saliendo” aunque sus socios “manipulen el Código Penal”.

Por su parte, el diputado del PSOE Fernando Fernández Lara ha calificado a Ayuso como “la presidenta más anti mujeres de España”, además de reprocharle que no quiera hacer un registro de objetores del aborto que “no señala a nadie” sino que garantiza que haya médicos “dispuestos a ejercer un derecho”.

“No va contra ellos, esto va a favor de las mujeres. Madrid es la única comunidad que además lo incumple, porque usted es la presidenta más anti mujeres de España. La que manda a las mujeres a abortar. La que no dedica ni un solo minuto a condenar los asesinatos machistas, y el PP sigue su estela”, ha afirmado, aludiendo al alcalde de Alpedrete, Juan Rodríguez, que hace “bandera del negacionismo”.

Más Madrid y la dictadura

La portavoz de Más Madrid en la Cámara, Manuela Bergerot, quien ha arrancando celebrando los 50 años de la muerte del dictador Francisco Franco. Bergerot ha reclamado a la presidenta que condene la dictadura franquista y ha deslizado que primero pensaba que tenía “envidia del Falcon” –el avión presidencial– pero al final tiene “envidia de Franco”.

Ayuso ha arrancado su intervención replicándole que ella nació en democracia, en 1978, y que aprendió de “aquellos españoles, padres y abuelos” que “no querían ni una España ni la otra”. A los que “pertenecían esa inmensa mayoría de españoles” que “nunca quisieron la guerra, que nunca vivieron de la Guerra Civil” y que “hoy temen” que se vuelva a “los males del guerracivilismo”.

Díaz Ayuso ha afirmado que para condenar la Guerra Civil “primero hay que condenar la antesala”, que es “levantar un muro entre españoles para que haya que acabar con el otro”.

Vox y la inmigración

La presidenta de la Comunidad de Madrid acusó a Vox de querer instalar la xenofobia en Madrid y de estar al servicio del presidente del Gobierno. Pedro Sánchez. Así lo afirmó ante la pregunta de la portavoz del Grupo Parlamentario Vox en la Asamblea de Madrid, Isabel Pérez Moñino, quien acusó a Ayuso de llevar a cabo una “política suicida de efecto llamada” de inmigrantes para luego “no tener capacidad para atenderlos”.

Ayuso denunció que Vox quiere instalar en este Madrid, “abierto, plural y de todos”, el “instinto xenófobo entre los jóvenes y en las redes sociales”, para que todo lo que ocurra “nunca sea culpa de quien tiene competencias en materia de inmigración, de extranjería y de fronteras, que es Pedro Sánchez, para quien trabajan”.