Algo no cuadra en España
Fraguas.- Cuando hago esta reflexión, me encuentro relajadísimo con una pierna mirando para Alemania y la otra para Inglaterra. Era una hermosa analogía que hacía Paco Martínez Soria para decir que su conciencia estaba tranquila. Con una taza en la mano que soporta una impresión que escribe un canto a la libertad, otra analogía que remite, al receptor del trago, a los vapores de elección personal deseados y soñados tantas veces, dice: “Esta taza es para café; pero puedes echarle lo que quieras”. También tengo otra que reza en letras grandes “Tú eres gilipollas”; pero esa no viene a cuento.
Me desayuno cada mañana las calorías necesarias para empezar el mundo y las estupideces suficientes para destruirlo. Estas últimas suelen llegar por las ondas de la tv, si es que llegan por el mismo cauce de siempre. Lo cierto es que no recuerdo siquiera que tenga antena en el tejado.
Programas y programas de televisión que no salen del bucle soporífero de las ideologías. El día de la marmota ya dura 47 años en España. Ya se acerca el día de la No Constitución.
En estas tertulias ya se huele la marca preelectoral que también en los últimos tiempos dura una eternidad. Se comenta que el mismo Cronos ha alquilado centenares de consignas para acumular tiempo. Los partidos lo agotan todo.
No hay manera de hacer ver a los mayores (y hablo de 50 para arriba) que han vivido una mentira impresa en sus genes que les ha condicionado la vida y les ha hecho vivir una ficción. Y creyéndose libres, siempre fueron siervos; pero quizá Prometeo, tanto tiempo inactivo, me haga el favor y entregue el fuego de la verdad a aquellos con ansias juveniles, escépticos, conspiranóicos o simples resquemados que intuyen que algo no cuadra.
Esta semana hemos visto a Mazón dimitir, justo cuando más lo necesitaba el gobierno ¿Casualidad? Quizás no haya tenido tiempo en un año; pero soy mal pensado desde chiquitito y con las cañas aprendí que en política, la evidencia no es la esencia, sino que esta última es el pegamento de la iniquidad y suele presentarse velada. Si algo te hace pensar, lo normal es que en su subsuelo hay algo tétrico que los políticos no quieren que veas. Lo que intuyo es un matrimonio concertado entre los grandes. PPSOE como siempre. Fejioo es el amigo del galgo. No me quedan dudas. Además, en una semana donde el otro gerifante, Don Santiago enseñaba el refajo y sin ápice de vergüenza elegía partido por encima de la Patria.
Comentábamos, amado lector, la semana pasada que uno puede ser patriota de boquilla y sacar partido electoral con ello; pero cuando la patria te llama, el fervor en la sangre te adelanta a la sin razón y al dueño del discurso patrio lo ha dejado en evidencia un chico de 35 años que no dudó ni un segundo. Alvise Pérez renunciaba al logro de su trabajo, al proyecto de su vida por el bien de la nación. No se vio la misma intención en los de VOX. Algo no cuadra.
Cuadra todo cuando los detalles no cuadran.
Lo del fiscal General del Estado es otra de las viñetas de este circo impostado que se llama partidocracia. La imagen era sorprendente. Este genio, no puede verse de otra manera, imputado hasta hace poco y sometido a juicio, se presenta vestido de merino con el boato de su toga, marcando autoridad y pecho. Ya es desconcertante la contradicción de que el reo vaya vestido de policía e insólito que exija sentarse en la tribuna de los magistrados, como uno más, dejando vacío y simbólicamente sin sentido la silla del acusado. El mensaje es ensordecedor.
Algo no cuadra ¿Me darían a mi ese trato en cualquier tribunal? “Todos los animales son iguales; pero algunos somos más iguales que otros”, decía Orwell en Rebelión En La Granja.
Y como en una película de Marvel, esperando un poco y después de los créditos, aparece una escena que te posiciona para el próximo capítulo. La escena suele ser sorprendente. Determina que en la próxima el desenlace está aún en el aire. En política viene a decir que no te creas lo que has visto, así no va a terminar. Me refiero al aplauso obsceno que los obscenos fiscales han regalado al Fiscal. De nuevo el mismo pensamiento, amado lector. Algo no cuadra.
Ya vimos la misma incoherencia con los supuestos representantes de la Nación aplaudiendo al satiríaco Ábalos. Por explicarlo, la satiríasis es al hombre lo que el furor uterino a las mujeres.
Aquellos que deben proteger nuestra heredad, aplaudieron al apuntado por el dedo de la justicia como amigo de nuestro patrimonio. Insólito. Algo no cuadra en España.
Mientras, el galgo está fuera del control de los medios. Protege a su amada y a su equipo, se beneficia de la imagen de la catástrofe olvidada (que se creen ellos) y pasa de rositas en una sesión del Senado donde la mejor de las noticias ha sido la marca de las gafas de presbicia intermitente. Todo muy surrealista.
Recapitulo hasta el nombrado Alvise Pérez; pues cuadraría que los medios de información recordaran a la Nación, si ésta existe, que hace un año con 70 de los suyos, picó y paleó Paiporta siendo el único político español que regaló sudor, esfuerzo, alojamiento, algunos cigarrillos y cervezas y una dosis extraordinaria de conciencia española y esperanzas a cambio de una faja lumbar. Hoy el premio, si alguien lo espera (que va a ser que no) se lo quiere llevar Sánchez con la misma intención que el Nobel de la Paz.
El por qué esta historia no es conocida fuera de Valencia, entra dentro de la jurisdicción del que es algo no cuadra.
Pero desde estas letras, recordando que la evidencia tapa la esencia verdadera, sabemos que precisamente que no cuadre, esclarece que todo en esta partidocracia es mentira, acedero y malamente intencionado.
Otro sorbito en brindis a Sánchez. Esta vez con la taza de “Tú eres gilipollas” que la he llenado con…












Que va a ser gipollas. Lo que son es perversos. Los diablos vienen a aprender a su escuela IS. “Os reís de nosotros porque somos diferentes. Pero yo me río más de vosotros porque sois todos iguales, so necios”.