Iberoamérica da la espalda a las fracasadas políticas de la izquierda y gira hacia la derecha en 2025
En 2025, Iberoamérica ha experimentado un giro político significativo hacia la derecha, marcado por el ascenso de líderes y movimientos de derecha en diversos países de la región. Este fenómeno ha sido impulsado por una combinación de factores económicos, sociales y políticos que han llevado a los votantes a buscar alternativas a los gobiernos de izquierda que dominaron la región en las décadas anteriores.
El resurgimiento de la derecha
El ciclo electoral iniciado con la elección de Mauricio Macri en Argentina en 2015 y consolidado con la llegada de Jair Bolsonaro al poder en Brasil en 2018, ha dado paso a una nueva ola conservadora en la región. Figuras como Javier Milei en Argentina, José Antonio Kast en Chile, Luis Fernando Camacho en Bolivia, Guido Manini Ríos en Uruguay, María Fernanda Cabal en Colombia, Zury Ríos en Guatemala, Rafael López Aliaga en Perú y Paraguayo Cubas en Paraguay han emergido como representantes de esta tendencia política.
Este resurgimiento de la derecha se ha caracterizado por un enfoque en la seguridad y el orden, y propuestas económicas orientadas al libre mercado.
Además, muchos de estos líderes han adoptado discursos nacionalistas y han buscado distanciarse de las influencias extranjeras, especialmente de organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional.
Factores que impulsan el giro hacia la derecha
Diversos factores han contribuido al ascenso de la derecha en América Latina:
La persistente desigualdad, la inflación y el desempleo han generado descontento entre la población, que busca alternativas a los modelos económicos tradicionales.
Así mismo, la creciente violencia y la presencia de grupos criminales han llevado a los votantes a apoyar candidatos que prometen mano dura y políticas de seguridad más estrictas.
La desconfianza en las instituciones ha sido otro factor clave. La percepción de corrupción y la ineficacia de los gobiernos de izquierda han minado la confianza en las instituciones democráticas, favoreciendo a líderes que se presentan como outsiders dispuestos a romper con el statu quo.
Por otra parte, el modelo de Nayib Bukele en El Salvador, caracterizado por un liderazgo fuerte y políticas de seguridad agresivas, ha servido de inspiración para otros líderes de derecha en la región.,
En resumen, América Latina vive un momento de transformación política, con un giro hacia la derecha que refleja el deseo de cambio y la búsqueda de soluciones a problemas persistentes que han sido agravados por la izquierda.












