Fraguas.- No se trata de libertad de expresión, nunca se trató de eso.

Nos enseñaron que la libertad de expresión era la base de la democracia y nosotros españolitos de Machado, en buena parte o inmensa cantidad, seguimos creyendo la falacia. La democracia no es poder decir, eso es salvado, desecho del grano verdadero arrastrado por el viento de la tiranía. La democracia es poder pensar y vivir en consecuencia y respeto al prójimo y a la sociedad con unas bases formales aceptadas por todos. El mero hecho de fijar como puntal sólo a la expresión y omitir al pensamiento, evidencia el trillo intencionado de la sentina de Nínive. La Constitución Española no ofrece la libertad de pensamiento.

Ahora la maquinaria es clara. El derecho sin democracia es contrario a la libertad y este se convierte en generadora de leyes, leyes que acotan la libertad y someten al ciudadano, para eso son las leyes.

Para dotar al Estado de poder frente a su contrapeso, la sociedad civil; así, un derecho tan simple como la libertad de expresión, se ve frenado por la extraña patraña de juzgar los sentimientos.

Españolito de Machado no tienes derecho a pensar en lo que quieras. Pensar libremente te aleja de la ideología común que abraza a los grandes de España, que no es derecha, ni izquierda, es sencillamente socialdemocracia o sea PPSOE.

Sabe, amado lector, que no soy partidario de largos artículos. Me da miedo pensar en que usted pueda decir: “Qué coñazo de tío”. -Eso es patente de mis hijos. Pero extiendo un poco y le ofrezco un ejemplo claro.

De una conversación de esta casa sobre el Islam, tres personas fueron acusadas de delito de odio. Tres personas cultas, conocedoras de su libertad de expresión y conocedoras de que el Islam es religión y por tanto abierta a crítica ¡Faltaría más!

Pero el as en la manga del poder es la falta de la libertad de pensamiento y aunque ellos no cayeran en cuenta, no existía en sus activos y hoy tienen y sufren una deuda. La patraña es que son juzgados sus sentimientos sobre una doctrina. Mañana bien podrían juzgarlos, a los padres Calvo y Custodio y al garante de esta casa, Armando Robles, de acometer verbalmente contra tribus antropofágicas y padecerían lo mismo.

En un artículo anterior dije que aquel que te da un derecho, te lo puede quitar. Españolito de Machado te dieron la libertad de expresión, hoy ya no la tienes tanto ¿Verdad?

Carlos herrera en COPE es conocedor del derecho y de esta casa y estoy seguro que de las personas afectadas. Y como su fuente de autoridad está fortalecida por sus credenciales y por un millón de personas que lo escuchan, puede sobrepasar los límites que impone el poder; pero usa, no olvidemos, la libertad de expresión para hacer crítica del sistema y con valentía arremete contra el poder; pero no rebasa el de pensamiento. Hasta él, el más poderosos de los periodistas españoles sabe que la línea de la libertad de expresión y de pensamiento es un alambre lleno de concertinas. Ojalá y hubiera más Herreras, Cárdenas y Castillón.

Pero poco a poco. Poco a poco.
Quienes creemos en la libertad, la conocemos por su ausencia y eso no significa que no luchemos cada día por su conquista.

Ánimo a los padres Custodio y Calvo y ánimo a mi amado amigo Armando que siendo, muy a veces, contrario a su ideología, me permite hablar, escribir y pensar lo que me nace.

Mis bendiciones