La cuadrilla del Búcaro.- Crónica matutina, en Dax nunca tengo prisa. Los de Margé no repitieron el éxito del año pasado en Dax.

Corrida muy seria, con mucha leña por delante, baja y bien hecha, a la que se intentó lucir en varas sin éxito. Baja de raza, dura y exigente, tuvo un juego dispar, desde el noble primero, hasta la mansedumbre rajada de los tres últimos.

Esaú Fernández puso disposición toda la tarde, incluidas las doble porta gayola, en el cuarto con susto. Trasteo fácil y despegado sin transmisión con el noble y soso primero.

El cuarto fue complicado y rajado, cumpliendo el Camero con oficio.
Reaparecía bien Juan de Castilla después del percance en Bayona. Vibrante y entregado el colombiano en una emocionante trasteo con intermitencias que llegó a los tendidos. Remató con la espada. Oreja. Muy firme le buscó las vueltas al imposible quinto. Estocada al encuentro. Vuelta.

Molina atesora buen concepto. El flojo tercero dijo poco. Excelente toreo al natural en el sexto que debió tener mayor eco en los tendidos.

La de Margé se quedó en la fachada, aunque la tarde tuvo emoción e interés. Un espectáculo visual sin fondo.