El paro registrado en España volvió a subir en agosto, con 21.905 desempleados más respecto a julio, lo que supone un incremento del 0,9%. Según los datos publicados por el Ministerio de Trabajo, el aumento se debió principalmente al sector servicios, tras el final de muchos contratos de verano.

Con este repunte, el número total de parados se sitúa en 2.426.511 personas, la cifra más baja en un mes de agosto desde 2007, aunque muy lejos de la recuperación plena que el Ejecutivo trata de vender. El dato es similar al de agosto de 2024 y sólo se explica por la estacionalidad del empleo en España.

Por sectores, la destrucción de empleo en los servicios fue determinante, con 21.692 desempleados más. También crecieron el paro en la industria (+2.775) y en la construcción (+2.745). Sólo la agricultura y el colectivo sin empleo anterior registraron descensos.

El paro subió tanto entre hombres como entre mujeres, con un repunte algo mayor en estas últimas (11.748 desempleadas más). En total, España cuenta con 1,47 millones de mujeres en paro y 954.780 hombres, este último dato por debajo del millón por cuarto mes consecutivo.

Por edades, preocupa especialmente el incremento del paro juvenil, con 3.485 menores de 25 años más en las listas del SEPE (+2,1%). Aunque el Ministerio presume de que los jóvenes en paro suman menos de 170.000, lo cierto es que la tendencia vuelve a ser ascendente.

En términos territoriales, el desempleo subió en 12 comunidades autónomas, con Cataluña (+7.942), Madrid (+4.214) y País Vasco (+4.178) a la cabeza. Solo cinco regiones lograron reducir el paro, destacando Castilla-La Mancha (-1.047) y Canarias (-873).

En cuanto a la contratación, el mercado sigue mostrando debilidad: en agosto se firmaron algo más de un millón de contratos, prácticamente los mismos que hace un año. Sin embargo, los indefinidos bajaron un 1%, hasta representar apenas el 37,1% del total, mientras que la temporalidad avanzó un 0,6%, hasta el 62,9%.

El gasto en prestaciones por desempleo también crece. En julio alcanzó los 2.004,8 millones de euros, un 6,6% más que en 2024. El gasto medio por beneficiario se situó en 1.315 euros, con un aumento del 23,8% en un año. La tasa de cobertura frente al paro sube al 82,4%, la más alta desde la pandemia.

En definitiva, el mes de agosto vuelve a poner de relieve la fragilidad estructural del mercado laboral en España, donde el empleo depende de la estacionalidad, la contratación indefinida retrocede y el paro juvenil repunta con fuerza.