Mundotoro.- Fue Málaga testigo de una faena de mucha hondura de Fortes. El malagueño cortó la única oreja de una tarde con mayor nota para el toreo que para la bravura. Buena faena de Urdiales que el presidente no reconoce y el público obliga al riojano a dar dos vueltas al ruedo, mientras que Pablo Aguado cuaja un sublime quite a la verónica y saca fondo de dos pozos sin agua que apenas le hubieran servido en años anteriores. Pero el 2025 de Aguado es diferente.

Cambió el ritmo de la tarde en el quinto con un gran recibo a la verónica de Fortes, antes de que Pablo Aguado dejara un excelso quite -también a la verónica- que puso a los tendidos de La Malagueta en pie. Quiso Fortes ajustarse en la réplica y el toro de Torrealta lo encunó a la altura de la ingle, aparentemente sin consecuencias. Tuvo el toro buen fondo, aunque una embestida que se vino abajo en los terrenos cercanos a las tablas en los que Fortes plasmó una faena de mucha entrega y asiento. De uno en uno, aprovechando siempre la querencia en el segundo muletazo, Fortes dejó naturales de categoría que llegaron mucho al público. Nada se hizo con prisas y sí con mucha hondura. Tras la estocada, cortó una oreja de ley.

De diferentes hechuras y expresión fue el segundo, un toro que tuvo menor entrega y una embestida justa de raza contraria siempre a la codicia y a la transmisión. Muy deslucido. Fortes enseñó la condición del toro en una faena desarrollada en los terrenos de cercanías. Dejó una gran estocada. Saludó una ovación.

Abrió plaza un toro de lujosas hechuras que marcó ya su clase y su ritmo en el buen recibo a la verónica de Diego Urdiales. Tuvo el toro de Torrealta una calidad siempre sujeta a una falta de fuerzas, por lo que se le cuidó en el caballo. Sin embargo, sí tuvo fondo de bravura y exigió siempre muletazos de largo trazo y mano baja, así como una media distancia entre muletazo y muletazo, para siempre enganchar al toro. Gustó en el público la torería de Diego Urdiales, que destacó en el toreo al natural. Una faena medida y de buen concepto que contó con una estocada como rúbrica. El público pidió la oreja, pero el presidente no lo vio oportuno. Dio dos vueltas al ruedo. La bronca para el presidente fue sonora.

El cuarto tuvo más cuajo y presencia, también mayor clase, pero regañada con el fondo y las fuerzas. Tuvo unas embestidas de calidad, pero con la transmisión justa para llegar a los tendidos. Torero estuvo de nuevo Diego Urdiales, que quiso hacer todo de manera templada, pero el público no admitió la condición del toro. Sí la disposición del torero. Dejó una estocada y saludó una ovación.

Salió sin ritmo y poca fijeza el tercero, con menos expresión que sus hermanos. Al toro de Torrealta le faltó entrega y clase en su embestida, pero Pablo Aguado lo consiguió dominar y poder al natural. A base de llevarlo siempre muy enganchado y sometido, el toro respondió mejor por abajo dentro de su informal condición. Ni una embestida fue igual, pero el sevillano estuvo muy firme sin renunciar a su torería. Dejó media estocada muy efectiva. Saludó una ovación.

Aguado volvió a mostrar una dimensión superior a la embestida del sexto, sin entrega y a media altura. Además, con un fondo escaso. El sevillano volvió a cuajar una faena de buen trazo a un pozo medio seco. No estuvo acertado con el acero. Silencio.

Ficha del Festejo:

Hierro de Torrealta – Plaza de toros de La Malagueta, Málaga. Corrida de toros. Quinto festejo de la Feria Taurina de Málaga 2025. Lleno de entrada. Toros de Torrealta, bien presentados, de mayor cuajo los tres últimos. De deslucido juego en su conjunto. Destacó el primero y el quinto, aunque de menos fondo.

• DIEGO URDIALES, dos vueltas al ruedo tras fuerte petición y ovación.

• FORTES, ovación y oreja.

• PABLO AGUADO, ovación y silencio.

Incidencias: Los banderilleros Joselito Rus y Sánchez Araujo se desmonteraron tras parear al sexto.