España se enfrenta a los incendios con un doble recorte en sus medios aéreos. Según un documento del Ministerio para la Transición Ecológica, el Ejecutivo de Pedro Sánchez pasó de 50 aeronaves contraincendios contratadas en 2024 a sólo 42 para el periodo 2025-2027, es decir, ocho menos que el año pasado, según informe Vózpopuli.

A este recorte coyuntural se suma una pérdida estructural: la flota propia de aviones anfibios del 43 Grupo del Ejército del Aire ha pasado de 18 a 14 unidades en la última década, debido al envejecimiento de los modelos CL-215T y CL-415 y al cierre de su línea de fabricación.

El ministerio admite que la ausencia de Presupuestos Generales para 2025 impide reforzar el dispositivo y obliga a «acomodar» los medios aéreos a este escenario, aplazando cualquier ampliación hasta que se «clarifique el marco presupuestario».

En 2024, se alcanzaron las 50 aeronaves gracias a seis contratos de emergencia, pero para este año el refuerzo no se repetirá. El informe también recuerda que desde 2024 no están operativos los helicópteros pesados Kamov Ka-32 11BC, de fabricación rusa, capaces de descargar 4.500 litros de agua. La razón: las sanciones de la UE a Moscú por la invasión de Ucrania, que han dejado a España sin un modelo de coste y capacidad equivalentes.

Hasta el 3 de agosto de 2025, el fuego ha arrasado 39.155 hectáreas, un 9% más que en el mismo periodo de 2024, y según el sistema europeo EFFIS, la cifra real supera las 60.000 hectáreas. Las llamas ya han superado en menos de ocho meses todo lo quemado el año pasado, con incendios activos en León, Tarifa, Ourense y Tres Cantos.