“Rusia tendrá que responder”: ¿cómo afectaría al proceso de paz el envío de misiles Taurus a Kiev?
Mientras Rusia apunta a una nueva ronda de negociaciones para alcanzar una solución a la crisis ucraniana, Occidente levanta las restricciones al alcance de los misiles que pueden ser enviados a Kiev.
¿Qué efecto podría tener eso para el desarrollo de las negociaciones de paz?
Incluso después de que el canciller alemán Friedrich Merz afirmara en una entrevista que se había eliminado las restricciones al alcance de las armas occidentales suministradas a Kiev y que la entrega de misiles Taurus a Ucrania parece una posibilidad, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ofreció a Kiev celebrar la segunda ronda de negociaciones en Estambul el 2 de junio.
Desde la perspectiva sobre el terreno y el punto de vista estratégico “los misiles occidentales pueden utilizarse contra instalaciones sensibles de vehículos terrestres y aéreos que posean armas nucleares”, opina el doctor en Ciencias Políticas por la Universidad Federal de Rio Grande do Sul (UFRGS) y presidente del Instituto Sudamericano de Política y Estrategia (ISAPE), Fabricio Ávila.
En este sentido, “Rusia tendría que responder en ambos escenarios contra los ucranianos, y esto perjudicaría las negociaciones de paz”, añade.
Profundizando en los medios de defensa que dispone Rusia, el analista destaca que Moscú puede rastrear las rutas previas de lanzamiento de misiles y establecer una red defensiva hasta su objetivo designado.
“Los rusos cuentan con varios sistemas móviles de guerra radioelectrónica, como el Krasuja, que puede causar interferencias en el área y provocar el mal funcionamiento del sistema inercial del misil Taurus”, precisa.
En cuanto al paso dado por Alemania en el contexto bélico, Ávila lo analiza como una justificación dada por el actual Gobierno alemán, que quiere fortalecer sus fuerzas armadas.
Sin embargo, las consecuencias pueden ser peligrosas: desde una “percepción rusa de un ataque de Occidente contra Rusia que puede generar, a largo plazo, un conflicto generalizado” hasta la posibilidad de que el rearme alemán “reavive rivalidades como la postura de Francia dentro del conflicto y del continente, que tal vez no perciba como adecuada esta iniciativa”, concluye.