Durante 50 años, los reguladores ignoraron un informe que vinculaba la radiación inalámbrica con 23 enfermedades crónicas
El gobierno de Estados Unidos sabe desde hace más de 50 años que la radiación inalámbrica está relacionada con 23 enfermedades crónicas, pero no ha logrado proteger al público de la exposición crónica a la radiación inalámbrica, según los autores de un nuevo informe .
Richard Lear y Camilla Rees publicaron su informe el 6 de febrero como preimpresión en ResearchGate. Lear y Rees son ejecutivos de empresas e investigadores de larga trayectoria en el ámbito de la salud y el medio ambiente.
El informe, que Rees llamó una “discusión y comentario” sobre la ciencia publicada relacionada con los impactos biológicos de la radiación inalámbrica, está dirigido a un público común.
Lear y Rees publicaron el informe en ResearchGate para hacerlo accesible al público.
El 14 de febrero, Rees compartió el documento con los asistentes a la conferencia anual de la Academia Estadounidense de Medicina Ambiental en San Antonio, Texas, según un comunicado de prensa .
Miriam Eckenfels, directora de Radiación Electromagnética (EMR) y Tecnología Inalámbrica de Children’s Health Defense (CHD) , calificó el informe como una “destilación fácil de entender de hallazgos científicos pertinentes que le da al público una idea de cómo las agencias reguladoras ignoraron la ciencia anterior y por qué las agencias necesitan tomar medidas de protección ahora”.
En el informe, Lear y Rees analizan cómo en 1971 el Instituto de Investigación Médica Naval de Estados Unidos emitió un informe que revisaba 2.311 estudios científicos sobre los efectos biológicos y sobre la salud de la radiación electromagnética (REM).
La mayoría de los estudios examinados por la Marina involucraron señales de EMR de baja intensidad en el rango de 1 a 4 gigahertz (GHz), dijeron Lear y Rees. “Estos tipos de exposiciones inalámbricas son prácticamente idénticas a las de los dispositivos modernos y las fuentes inalámbricas como teléfonos celulares, WiFi, Bluetooth, medidores inteligentes , GPS, dispositivos portátiles e infraestructura inalámbrica”.
La revisión de la Marina encontró 132 efectos biológicos, síntomas y enfermedades diferentes vinculados a la exposición a tecnologías inalámbricas .
Según Lear y Rees, 23 de ellas se encuentran entre las enfermedades y afecciones crónicas de más rápido crecimiento en los EE. UU. en la actualidad, entre ellas el trastorno por déficit de atención e hiperactividad o TDAH, la ansiedad, el asma, el autismo, la fatiga crónica, la diabetes, la leucemia, las enfermedades autoinmunes y la enfermedad celíaca.
En 2016, Lear examinó el crecimiento de las enfermedades crónicas entre 1990 y 2015 y los costos económicos relacionados con ellas. Su investigación descubrió que 36 enfermedades y afecciones crónicas se duplicaron entre 1990 y 2015.
“De las 36 enfermedades y afecciones crónicas que aumentaron más del doble (1990-2015), el estudio de la Marina de Estados Unidos nos advirtió de la conexión entre la radiación inalámbrica y veintitrés de esas enfermedades crónicas, prediciendo lo que de hecho ha sucedido con la salud de los estadounidenses”, escribieron los autores del informe.
Agregaron:
“Al ignorar la ciencia anterior, los reguladores estadounidenses no lograron proteger al pueblo estadounidense de los peligros de las tecnologías inalámbricas. Al hacerlo, impusieron millones de condiciones de exposición crónica innecesarias al público estadounidense”.
Rees dijo a The Defender que espera que los reguladores estadounidenses finalmente tomen medidas. “Es necesario ejercer presión desde todos los frentes para alentar a las agencias reguladoras federales a que hagan su trabajo y a que estas agencias rindan cuentas”.
La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) no ha actualizado sus límites de exposición a la radiación inalámbrica desde 1996.
En 2021, CHD y otros grupos ganaron una demanda que impugnaba los límites de exposición de la FCC.
Los grupos presentaron 11.000 páginas de pruebas sobre los daños causados por la tecnología inalámbrica y 5G, que según afirmaron la FCC ignoró cuando decidió mantener sus directrices de 1996. Las páginas incluían pruebas de enfermedades generalizadas debido a la exposición a la radiación inalámbrica.
La FCC aún tiene que cumplir con un mandato judicial de explicar cómo la agencia determinó que sus directrices actuales protegen adecuadamente a los humanos y al medio ambiente contra los efectos nocivos de la exposición a la radiación inalámbrica.
Lear y Rees planean enviar copias impresas de su informe a todos los miembros del Congreso de Estados Unidos y al menos a 1.000 líderes empresariales del país.
“Queremos que esta información llegue a las personas que son lo suficientemente valientes como para marcar una diferencia, incluidos líderes gubernamentales, líderes empresariales, líderes religiosos y medios de comunicación”, dijo Rees.
Los líderes empresariales necesitan comprender la conexión entre la exposición inalámbrica y el estado de ánimo, la salud y, por lo tanto, la productividad de sus empleados, afirmó.
Rees es asesor principal de políticas del Instituto Nacional de Ciencias, Derecho y Políticas Públicas y fundador de Manhattan Neighbors for Safer Telecommunications .
Según el informe:
“Para 2015, las 23 enfermedades que predijo la Marina de Estados Unidos podrían haber añadido más de 2 billones de dólares en costos anuales de atención médica a la economía estadounidense debido a su negligencia”.
Los autores reconocieron que otros factores probablemente han contribuido a la actual crisis de enfermedades crónicas en Estados Unidos, como el consumo de azúcar y la exposición al glifosato y otros pesticidas.
“Nos han engañado sobre los beneficios de la tecnología inalámbrica”
En el informe, Lear y Rees también citan otros informes científicos que han demostrado un vínculo entre la radiación inalámbrica y los impactos negativos en la salud , incluido el Informe BioInitiative 2012 .
El Informe BioInitiative, actualizado en 2017, cita más de 2.200 estudios científicos que vinculan la exposición a EMR de bajo nivel con docenas de enfermedades y efectos biológicos, incluidos efectos neurológicos, cáncer cerebral, efectos fetales, daño a la barrera hematoencefálica, daño al ADN, cáncer de mama, desequilibrios bioquímicos, leucemia, disminución de la fertilidad y estrés oxidativo.
El informe también analiza estudios que sugieren un posible mecanismo biológico para explicar cómo la radiación inalámbrica está vinculada a las enfermedades crónicas.
Rees dijo: “Nos han engañado sobre los beneficios relativos de la tecnología inalámbrica”.
Las conexiones por cable son muy superiores a las inalámbricas por numerosas razones, incluida la velocidad de conexión, según un informe de 2018 del Instituto Nacional de Ciencias, Derecho y Políticas Públicas .
“Es más rápido, mucho más eficiente energéticamente, de mayor calidad de audio, más confiable, más resistente a los fenómenos meteorológicos, más seguro y más duradero, lo que significa que no está sujeto a los costos de la obsolescencia programada como las tecnologías inalámbricas”, dijo Rees.
Añadió:
“Debemos empezar a asumir nuestra propia responsabilidad y minimizar nuestra exposición personal a las redes inalámbricas, al tiempo que apoyamos iniciativas como la nueva iniciativa ‘ 704 No More ‘ de CHD para restablecer el control local sobre las torres y antenas de telefonía móvil”.
La iniciativa 704 No More está recaudando dinero para desafiar legalmente la Sección 704 de la Ley de Telecomunicaciones de 1996, que prohíbe a las autoridades locales negar solicitudes de torres de telefonía celular basándose en efectos sobre la salud y el medio ambiente.
Está claro que a los de arriba nuestra salud les importa un bledo. Eso si, cada vez se ven más “magnates multimillonarios” con una vida activa pasando los 90 años…¿Curioso, verdad?
Hacen pactos con el diablo, además ellos si saben lo que hace daño (vacunas, ondas electromagnéticas, mierdas mil que meten en la comida etc).
Está clarísimo que desde hace más de lo que imaginamos están practicando nuestro genocidio actuando desde múltiples acciones “sectoriales” convergentes en la reducción de la población sin que nos demos cuenta. Y es que .. No somos tontos…
Pues si, el NWO, AG21/2030 se cimenta en que en el futuro debe haber poca poblacion, estando esta bajo un control global distopico.
VCNs, Transgenicos, Chemtrails, XG, Quimioterapia, Pesticidas, Farmacos, Fluorizar el Agua, E Quimicos, Alimentos Ultraprocesados, Agenda Gay,,,,,todo suma para conseguir el objetivo.
Cuanto más enfermo estés, más te quiero y más farmacopea te vendo, tonto.
¿Por qué no nos dan la lista de esas 23 enfermedades crónicas?
La clave es ¿Que son los virus?, cuando hay un incendio veran enseguida bomberos y policias, ¿Son los responsables?, evidentemente estos no lo provocaron, son consecuencia de este, vinieron luego.
Lo mismo pasa con los Virus, serian exosomas que desprenden las celulas moribundas o por encontrarse en un entorno toxico, como seria entre otros un campo electromagnetico pulsante, cuanto mas potente y mas alta la frecuencia seria mas dañino.
Rudolf Steiner, un gran sabio y vidente cuasi olvidado lo explica muy bien.