Disney ha visto cómo sus acciones, que ya estaban en problemas, se desplomaban en los últimos meses. En abril, subieron hasta los 123 dólares por acción, frente a los 91 dólares de principios de año. En mayo, las acciones de Disney Grooming Syndicate alcanzaron los 116 dólares.

Pero todas las ganancias de este año ya se esfumaron. Actualmente, las acciones cotizan a solo 90 dólares por acción.

Ike Perlmutter es el antiguo presidente de Marvel Entertainment, que el año pasado intentó obtener un puesto en el consejo de administración de Disney, pero fracasó en su intento. A él se unió el accionista activista de Disney Nelson Peltz. La esperanza era arrebatarle parte del control al consejero delegado de Disney, Bob Iger.

Perlmutter había sido uno de los mayores accionistas y principales críticos de Disney debido a la dirección política de la empresa y el posterior desplome de la cotización de las acciones.

En 2021, las acciones de Disney empezaron a desplomarse, ya que valían casi 200 dólares por acción antes de que decidiera hiperpolitizar sus películas y programas de televisión. Disney se centró específicamente en los niños pequeños para manipularlos con propaganda de temática gay destinada a sexualizarlos y alentarlos a cuestionar su género. Esto, por supuesto, puede conducir a problemas psicológicos y luego a horrores médicos como la esterilización y la mutilación física.

Además, Disney destruyó algunas de sus franquicias Golden Geese más queridas y rentables (Marvel, Pixar, Star Wars, Willow, Indiana Jones , etc.) al convertirlas en videos de propaganda de izquierda obsesionados con la sexualidad, la raza y el género.

El único punto positivo en la programación de Disney después de más de un año de catástrofes de taquilla ha sido el gran éxito de taquilla de Intensamente 2 de Pixar. Pero Intensamente es apolítica: la única película de Disney que no tiene como objetivo manipular a los niños y robarles la inocencia.

Antes de la campaña “woke” de Disney, una acción costaba unos 175 dólares. Ahora valen poco más de la mitad.

Después de que la batalla por poderes del año pasado no consiguiera enderezar el barco que se hundía, Perlmutter empezó a deshacerse de toda su participación en Disney-25,6 millones de acciones valoradas en unos 3.000 millones de dólares.

Según Variety, de extrema izquierda, Perlmutter «vendió su participación en Disney entre principios de abril y mediados de julio a un precio medio de poco menos de 115 $/acción (…) Perlmutter dijo que espera que las acciones de Disney sigan cayendo, y que si el precio de la acción cae a 65-75 dólares por acción, planea recomprar gran parte de sus participaciones anteriores».