Junts ha dado este miércoles su primer paso para salir de la oposición dura al Gobierno del PSOE y convertirse en un aliado de Pedro Sánchez, en un partido que participe de la gobernabilidad de España. Es un paso complicado para el espacio posconvergente porque supone una autoenmienda a lo que ha hecho durante los últimos cinco años y porque le va a conllevar un desgaste en la política catalana, comenzando por una escisión liderada por Clara Ponsatí. En este sentido, probablemente, para amortiguar el impacto de ese giro político, Junts ha recurrido a la escenificación para aparentar que no claudica ante el PSOE y en las últimas horas ha llegado a amagar con replantearse su voto, aunque todo apunta a que mantendrán en el apoyo al candidato socialista. Además, la portavoz en el Congreso Míriam Nogueras ha lanzado una advertencia a Sánchez: “No tiente a la suerte”.

A juicio de Nogueras, el discurso de Sánchez ha sido poco valiente porque ha empleado la palabra “diálogo” y “perdón” para referirse a la “negociación” y la “amnistía”. La portavoz posconvergente ha recordado que esas son las palabras que figuraban en el acuerdo firmado por ambos partidos y, por ello, ha preguntado a Sánchez si está dispuesto a cumplir con todos los puntos del pacto. Sánchez ha respondido inmediatamente diciendo que sí: “El acuerdo que hemos alcanzado, que ha sido muy difícil porque partimos de posiciones muy alejadas, cuenta con el compromiso del PSOE y el mío para cumplirlo. Y por supuesto, vamos a aprobar la amnistía”. De esta manera, Sánchez ha querido despejar las dudas sobre un posible paso atrás del PSOE en torno a los compromisos que alcanzaron.

En todo caso, Sánchez ha ahondado en que parten de posiciones muy alejadas, pero también ha subrayado que no van a pedir que Junts renuncie a sus postulados, favorables a la independencia de Cataluña. “Me reafirmo en el compromiso para caminar y avanzar en la solución de este conflicto político”, ha añadido Sánchez. El candidato socialista, de hecho, se ha comprometido a que durante esta legislatura se van a dar “pasos para resolver el conflicto político”, por lo que hay que ver cómo evoluciona la mesa de diálogo, que está previsto que se reúna este mismo mes de noviembre.

En ese espacio, se pretende abordar acuerdos referentes a la mejora del autogobierno de Cataluña y al “reconocimiento nacional”. Sobre la segunda carpeta, las distancias son considerables entre ambas formaciones y habrá que ver hasta dónde llegan porque el PSOE sí que ha situado el referéndum de autodeterminación como línea roja.

Ante esto, Nogueras ha querido releer lo que dice el acuerdo sobre la “estabilidad” de la legislatura: según ha recordado, está “sujeta a los avances y cumplimiento de los acuerdos que resulten de las negociaciones en los dos ámbitos permanentes señalados en el punto segundo”. En cualquier caso, la portavoz de Junts, en un ataque velado a ERC, ha reivindicado que el acuerdo con el PSOE es “disruptivo” porque fuerza al Gobierno a abordar el tema catalán de “manera directa”. “Lo verdaderamente disruptivo es que se reconozca como lo que es, un conflicto”, ha señalado Nogueras, destacando que se haya introducido el referéndum como una de las “propuestas para resolver el conflicto”.