Nuevas imágenes corroboran informes anteriores de que el ejército israelí es responsable de un gran número de víctimas israelíes durante el primer día de la Operación Inundación de Al-Aqsa. El 7 de octubre helicópteros apaches israelíes mataron a soldados y civiles hebreos

El ejército israelí ha publicado imágenes de drones que mostraban cientos de autos quemados y dañados en el festival de música Nova, lo que proporciona una evidencia adicional de que las fuerzas israelíes probablemente mataron a muchos de los suyos durante el inicio de la Operación Inundación de Al-Aqsa el 7 de octubre.

El festival Nova tuvo lugar cerca del kibbutz Beeri, a sólo cinco kilómetros del muro de separación de Gaza. Fue uno de los primeros objetivos alcanzados por los combatientes de la resistencia palestina cuando salieron de Gaza, atacando bases militares y asentamientos a las 6:30.de la mañana. Durante el ataque, los combatientes palestinos lograron hacer prisioneros a unos 240 israelíes, entre soldados, colonos y extranjeros. Las nuevas imágenes de drones muestran la vista aérea de cientos de autos quemados y destruidos que fueron retirados del sitio del festival y colocados en un estacionamiento de tierra, creando un depósito de chatarra improvisado.

El servicio de rescate israelí Zaka afirma haber retirado 260 cadáveres del recinto del festival. Israel dice que fueron masacrados por combatientes de Hamas y saqueadores civiles palestinos que cruzaron la valla fronteriza abierta de Gaza en las horas posteriores al ataque de Hamas. Sin embargo, las imágenes parecen confirmar informes anteriores de los medios israelíes de que pilotos israelíes que utilizaban helicópteros Apache respondieron a los ataques abriendo fuego tanto contra Hamás como contra combatientes israelíes.

El 15 de octubre, un artículo en Yedioth Ahronoth explicaba que los primeros helicópteros llegaron a la Franja de Gaza aproximadamente una hora después de que comenzaran los combates. El periódico en hebreo informa que la misión de los helicópteros de combate y los drones armados Zik era detener el flujo de combatientes y saqueadores de Hamás que ingresan al territorio israelí a través de las brechas en la valla fronteriza de Gaza.

Esta misión se complicó por la dificultad que tenían los pilotos para distinguir entre los combatientes de Hamás, los saqueadores palestinos vestidos de civil y los israelíes. El periódico señala que “esta complicación continuó durante un tiempo considerable, hasta que los Apaches tuvieron que eludir todas las restricciones. Sólo alrededor de las 9 de la mañana algunos de ellos comenzaron a fumigar a los terroristas con sus propios cañones, sin autorización de sus superiores. La velocidad de disparo contra los miles de terroristas fue inicialmente enorme, y sólo en un momento determinado los pilotos empezaron a frenar los ataques y a seleccionar cuidadosamente su objetivo”, añade el periódico.

A pesar de la confusión, veintiocho helicópteros de combate israelíes dispararon toda la munición que tenían, incluidos cientos de proyectiles de 30 mm y misiles Hellfire, en el transcurso de la jornada. Después de aterrizar su Apache para recargar munición alrededor de las 10 de la mañana, el comandante del Escuadrón 190 ordenó a los demás pilotos que “dispararan a todo lo que vieran en la zona de la valla”, que separa Israel de Gaza.

El mismo comandante atacó un puesto militar israelí con soldados asediados en su interior para ayudar al ejército israelí a retomarlo de manos de Hamás y abrió fuego cerca de las casas de un kibutz para apoyar a un oficial de la División del Sinaí que se había lanzado en paracaídas para luchar contra los militantes de Hamás. Según la Fuerza Aérea, en las primeras cuatro horas después del inicio de los combates, helicópteros y aviones de combate atacaron alrededor de 300 objetivos, la mayoría de los cuales se encontraban en territorio israelí.

La respuesta de Israel al ataque de Hamás y la cuestión de los cautivos fue planteada en comentarios del portavoz militar israelí, el contraalmirante Daniel Hagari, el 7 de octubre. Describió cómo el ejército israelí abordó las “ situaciones de rehenes ” utilizando tanto ataques aéreos como fuerzas terrestres.

Hagari dijo que el ejército estaba “luchando en 22 lugares “, y añadió que no había ” ninguna comunidad en el sur de Israel donde no tuviéramos fuerzas, en cada ciudad. Hay fuerzas especiales con comandantes de alto rango y allí se están produciendo tiroteos reales “, dijo. La Fuerza Aérea israelí llevó a cabo ataques en “varios lugares”, dijo Hagari, añadiendo que hubo “centenares de muertes, incluidos muchos terroristas”.

El objetivo principal es “eliminar a todos “aquellos que se infiltraron en Israel y están tratando de regresar a la Franja de Gaza”, añadió. “Primero atacaremos desde el aire y luego con medios terrestres pesados”. Responder a situaciones de toma de rehenes con tanta potencia de fuego significa que la seguridad de los propios rehenes no es una prioridad.

The Guardian informó que el influyente ministro de Finanzas israelí y líder de los colonos, Bezalel Smotrich, instó al ejército israelí a “atacar brutalmente a Hamás e ignorar la cuestión de los cautivos” durante una reunión del gabinete el 7 de octubre, mientras el ataque de Hamás aún estaba en marcha.

Yasmin Porat, que sobrevivió al ataque de Hamas contra el Kibbutz Be’eri cerca de Gaza el 7 de octubre, dijo en una entrevista de radio en la emisora pública israelí Kan que las fuerzas de seguridad también mataron a civiles israelíes. “Eliminaron a todos, incluidos los rehenes “, dijo a Kan la madre de tres hijos. “Hubo un fuego cruzado muy, muy intenso”.

El diario liberal israelí Haaretz publicó un extenso artículo el 13 de octubre describiendo cómo un comandante israelí, el general de brigada Avi Rosenfeld de la División de Gaza, tomó la difícil decisión de convocar ataques aéreos contra su propia base mientras los combatientes de Hamás la invadían, capturando y matando a muchos soldados allí.

Atrincherado en la sala de guerra subterránea de la división con un puñado de hombres y mujeres, Rosenfeld intentó “desesperadamente salvar y organizar el sector atacado “. Muchos soldados, la mayoría de los cuales no eran combatientes, murieron o resultaron heridos afuera. La división se vio obligada a solicitar un ataque aéreo contra la propia base para repeler a los terroristas”.

Un caso similar ocurrió en Sderot, una localidad de 30.000 habitantes situada a 12 kilómetros de la frontera con Gaza, durante el ataque de Hamás el pasado 7 de octubre. La periodista Stephanie Freid del canal chino CGTN visitó Sderot una semana después. Informó que Sderot era una ciudad asaltada por combatientes de Hamas . Murieron muchas personas y hubo intercambios de disparos. La prueba son los escombros de la comisaría. Murieron hasta 20 personas, incluidos presos que se encontraban detenidos en la comisaría. Los combatientes de Hamás y sus policías prisioneros aparentemente murieron cuando las fuerzas israelíes abrieron fuego contra la comisaría con un tanque de asalto.

Fuente: https://echelledejacob.blogspot.com/2023/11/le-7-octobre-des-helicopteres-apache.html