Un tribunal de Alberta, Canadá, condenó el lunes al pastor Artur Pawlowski a 60 días de prisión por un discurso ante los camioneros de Freedom Convoy en febrero de 2022 en el que apoyó sus protestas contra el cierre represivo, las vacunas y otros mandatos relacionados con la pandemia del coronavirus de Wuhan.

Pawlowski, quien saltó a la fama por expulsar a la policía canadiense de su iglesia por intentar cerrar un servicio de Pascua en 2021, enfrentó múltiples cargos, entre ellos “travesura”, un delito en Canadá, y violación de la Ley de Defensa de Infraestructuras Críticas (CIDA). Este último cargo sugirió que el discurso de Pawlowski a los manifestantes en la frontera entre Alberta y Montana fue un ataque a la infraestructura vial de la provincia, ya que los alentó a continuar con un bloqueo en curso exigiendo el levantamiento de los mandatos relacionados con el coronavirus. Los fiscales exigían hasta diez meses de prisión para el pastor porque ha negado pública y repetidamente tener remordimiento alguno por su abierta oposición a los confinamientos.

“No me avergüenzo de lo que hice. Si tuviera la oportunidad de volver a hacerlo, lo haría de nuevo con mucho gusto”, dijo Pawlowski ante una multitud de seguidores tras su condena el lunes.

El juez Gordon Krinke se reservó una condena por los cargos de ataque a la infraestructura, ya que la defensa de Pawlowski había impugnado la CIDA por inconstitucional y los procedimientos relacionados con esa ley están en curso. En mayo, encontró a Pawlowski culpable de “travesuras” y de violar una orden de liberación . La sentencia de 60 días dictada el lunes incluye el tiempo cumplido, por lo que Pawlowski salió libre del tribunal, pero con una condena penal en su historial.

“Se requiere un período de encarcelamiento para lograr los objetivos de denuncia y disuasión”, dijo Krinke en la sentencia, según la CBC.

Antes de la sentencia, el fiscal Steven Johnston argumentó que el caso, en el que Pawlowski enfrentaba cargos por pronunciar un sermón , “no se trataba de libertad de religión ni de libertad de expresión”.

“En este caso, el acusado comparece ante el tribunal sin ningún sentimiento de remordimiento”, dijo Johnston. “La falta de remordimiento, la falta de introspección es importante en este caso porque probablemente corra un alto riesgo de rehacer esto”.

Pawlowski pareció estar de acuerdo en declaraciones a los 200 seguidores que se reunieron para celebrar su liberación el lunes.

“Durante los últimos 18 meses han hecho todo lo posible para obligarme a decir que soy culpable, que lo siento. Me estaban obligando a pedir disculpas, pero no tengo nada por qué disculparme”, dijo el pastor.

“Espero que mis opresores estén escuchando porque esto no ha terminado. Esto es sólo el comienzo”, añadió Pawlowski, afirmando también que repetiría “con mucho gusto” las acciones que resultaron en su arresto si lo considerara necesario:

Cientos de simpatizantes se manifestaron de manera similar en apoyo del pastor luego de su condena inicial en mayo.

Canadá enfrentó una ola de protestas a principios de 2022 que luego se conoció como el “Convoy de la Libertad” debido a la gran presencia de camioneros que utilizaron sus vehículos para ocupar espacios en todo el país en señal de protesta. Muchos se reunieron en Ottawa, la capital del país, donde bloquearon las calles con sus camiones, tocaron las bocinas durante largos períodos de tiempo y construyeron un campamento pacífico con una atmósfera de festival al que muchos llevaron a sus hijos.

El objetivo de las protestas del Freedom Convoy era presionar al primer ministro de izquierda radical Justin Trudeau y a los gobiernos provinciales para que pusieran fin a los mandatos de vacunación, que perjudicaban desproporcionadamente a los camioneros que intentaban viajar regularmente entre provincias, así como a la suspensión de las libertades de reunión y de religión. Los manifestantes también exigieron la reapertura total de todas las escuelas, el fin de los mandatos de enmascaramiento y otras restricciones.

Pawlowski fue acusado de acciones penales por su discurso ante un grupo Freedom Convoy que se reunió en la frontera entre Alberta y Montana a principios de 2022, provocando importantes perturbaciones en el comercio regional al cerrar la carretera. El primer ministro de Alberta, Jason Kenney, puso fin al sistema de pasaportes de vacunas y al mandato de mascarillas para los escolares vigentes en ese momento durante el bloqueo en curso.

Pawlowski dijo a los manifestantes durante un sermón en el Smuggler’s Saloon local en febrero de 2022 que eran “héroes” y los animó a no “romper la línea”.

“Creo que los ojos del mundo están fijos en este lugar. Así es, este pequeño y lamentable pedazo de tierra”, dijo Pawlowski . “Los ojos del mundo están fijos aquí en ustedes. Ustedes son los héroes. No te atrevas a romper la línea. … Por primera vez en dos años, tienes el poder. Empacas tus cosas, vas a Edmonton y te perderás”.

Pawlowski se ha enfrentado a una serie de otros cargos penales por su oposición a las restricciones a la libertad de reunión y otras violaciones de los derechos civiles por parte del gobierno de Trudeau durante la pandemia.

Pawlowski enfrentó problemas policiales por primera vez por celebrar un servicio de Pascua “ilegal” en abril de 2021, que atrajo a seis agentes de policía que intentaron cerrarlo. Pawlowski los obligó a salir de su iglesia, despreciándolos como “fascistas comunistas nazis de la Gestapo” y “psicópatas”, y continuó su servicio. La policía lo arrestó un mes después por continuar sirviendo a sus fieles, contrariamente a las restricciones religiosas impuestas por los funcionarios canadienses:

Además de multas, restricciones de viaje y encarcelamiento, el gobierno canadiense intentó obligar a Pawlowski a leer una declaración gubernamental cada vez que condenaba las violaciones de los derechos civiles en nombre de la pandemia, que decía en parte: “La mayoría de los expertos médicos favorecen las políticas sociales”. distanciarse, usar mascarillas y evitar grandes multitudes para reducir la propagación de COVID-19”.

Pawlowski apeló los numerosos cargos en su contra por desempeñar las responsabilidades de pastor y, en julio de 2022, un tribunal de apelaciones de Alberta estuvo de acuerdo y dictaminó que su arresto y muchas multas y otros castigos eran ilegales.

Trudeau, quien confesó memorablemente en 2019 que se había pintado la cara de negro con tanta frecuencia que no recordaba cada vez que lo hizo, condenó a quienes se opusieron a sus violaciones de los derechos civiles, llamándolos “turbas racistas, misóginas… anti-vacunas”, acusando Los partidarios de Freedom Convoy utilizaron una “retórica de odio” y se burlaron de ellos calificándolos de “sombreros de papel de aluminio” y “algunas personas gritando y agitando esvásticas”.