Hasta hace un par de décadas, era casi inimaginable el cole digital para los niños. Sin embargo, actualmente, el entorno digital es una realidad imprescindible en el día a día de los pequeños de la casa. Por esta razón, es importante que los padres apuesten por mejorar y fortalecer la seguridad digital de los menores.

Gracias al avance de la tecnología y la masificación de Internet, derechos fundamentales como la libertad de expresión y la educación y alfabetización digital se han hecho más accesibles a un importante número de la población mundial: desde niños y niñas hasta adultos. No obstante, el entorno digital al que cientos de miles de niños españoles tienen acceso también representa grandes riesgos para su seguridad y privacidad.

De acuerdo con un estudio reciente, elaborado por Panda Security, los hogares españoles aplican menos medidas de seguridad en los dispositivos digitales de los hijos, en comparación con el resto de Europa. De media, en el 40 % de los ordenadores, móviles o tablets a nivel nacional no existe un programa que garantice la ciberseguridad del usuario.

Ahora que la inminente vuelta al cole es más digital que nunca, conviene que los padres presten mayor atención sobre la conexión escolar de los más pequeños de la casa, ya que las redes sociales tan solo son una parte del problema: los más pequeños de la casa pueden ser víctimas de estafas o acceder, por casualidad, a contenido violento, sexual o de actividades ilícitas.

Los dispositivos infantiles y el control parental

El I Observatorio de Ciberseguridad en Internet arrojó que el 80 % de los padres y madres en España con hijos menores de 18 años les preocupa lo que los jóvenes pueden hacer en el mundo virtual al conectarse a Internet. En este sentido, el Global Consumer Operations Manager de Panda Security, Hervé Lambert, explica que “la vigilancia de los menores en el mundo digital es uno más de los frentes abiertos para las familias y no solo en la difícil etapa de la adolescencia, sino también en edades mucho más tempranas que, en algunos casos, pueden remontarse al carrito de bebé y que ahora cuenta con un nuevo imponderable como es la incorporación del mundo digital a las aulas”.

Pero, aunque, al menos, 9 de cada 10 padres aseguran que controlan lo que sus hijos realizan en Internet, tan solo 6 de cada 10 padres y madres han decidido aplicar alguna opción de control parental en los dispositivos tecnológicos del hogar.

Por otra parte, el acoso también ha migrado al mundo digital. El 7,5 % de los padres encuestados aseguraron que sus hijos han sufrido ciberacoso alguna vez, una lacra que deja secuelas psicológicas y sociales en los más pequeños.

Por esta razón, los especialistas en ciberseguridad como Panda Security recomiendan a los padres limitar el uso del tiempo de las pantallas y los contenidos, a la vez que es necesario emplear herramientas digitales como los controles parentales, los cuales ayudan a fomentar un uso responsable, seguro y saludable de Internet.