Erik Tadeo Ramírez, residente en Texas, fue secuestrado en su casa en la ciudad de Laredo, horas después de que durante una fiesta alardeara por teléfono haber robado unos 50.000 dólares al Cártel Del Noreste de México, informa Laredo Morning Times.

Los hechos ocurrieron el 24 de marzo cuando, según el relato de los vecinos, una camioneta se acercó a la casa de Ramírez y tres hombres armados bajaron y empujaron al hombre al interior y se lo llevaron. Los secuestradores se dirigieron hacia la frontera con México y tras cruzar el puente internacional Juárez-Lincoln llegaron a la ciudad mexicana de Nuevo Laredo. Las cámaras de tráfico mostraron a Ramírez con la cara ensangrentada intentando salir de un vehículo en marcha, pero no lo consiguió.

La Policía averiguó que la camioneta pertenecía a la madre de un hombre de apellido Cavriales y se puso en contacto con ella. La mujer afirmó que la abuela del hombre, que vive en Nuevo Laredo, la había llamado y le había dicho que Cavriales estaba en su casa y que el vehículo estaba aparcado delante de su vivienda.

Cavriales fue detenido por agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. el 27 de marzo cuando cruzaba la frontera entre México y EE.UU. por el puente internacional Juárez-Lincoln. Tras su detención, Cavriales confesó haber secuestrado a Ramírez y declaró que otras tres personas estaban implicadas. Al mismo tiempo, el hombre sostuvo que sabía que la víctima había robado dinero al Cártel Del Noreste, que es una rama del Cártel de Los Zetas, considerado como uno de los más poderosos de México.

Otras personas implicadas en el secuestro siguen en libertad. La Policía continúa la investigación y búsqueda de Ramírez, quien sigue desaparecido.