Más de 1.200 estudiantes iraníes fueron envenenados para evitar las masivas protestas universitarias contra el régimen
Santiago Vera.- Miles de estudiantes fueron víctimas de una intoxicación alimentaria justo antes de que una demostración nacional masiva en el país para protestar contra el régimen por el asesinato de Mahsa Amini el pasado 16 de septiembre.
Un grupo de 1.200 estudiantes universitarios en Irán se han visto afectados por intoxicación alimentaria poco tiempo antes de que comenzara una masiva demostración y manifestación en contra del régimen, que estaban planificadas a expandirse por todo el país, informó el Daily Telegraph.
Los estudiantes de las universidades de Kharazmi y Arak, y de otras cuatro instituciones, arrojaron sus alimentos en las calles en signo de protesta después de que se registrara la intoxicación, luego de que el sindicato nacional de estudiantes acusara a las autoridades de envenenar deliberadamente a las personas para frenar las manifestaciones.
Los estudiantes experimentaron vómitos, fuertes dolores corporales y alucinaciones, afirmó el jueves el sindicato. Según los informes, los estudiantes no infectados están boicoteando las cafeterías en respuesta a las intoxicaciones.
Los funcionarios del régimen alegan que la causa principal de la intoxicación fue la ingesta de bacterias en el agua, pero el sindicato de estudiantes postuló que la población fue envenenada intencionalmente. Cabe recordar que este hecho se produce justo antes de que comience una manifestación nacional de tres días convocada por los estudiantes.
En un comunicado oficial, el sindicato dijo que “nuestras experiencias pasadas de incidentes similares en la universidad de Isfahan niegan la razón de las autoridades para esta intoxicación alimentaria masiva”.
Tras el incidente, los estudiantes de la Universidad de Isfahan exigieron la renuncia de los funcionarios de la universidad. “¡No queremos comida podrida, no queremos autoridades asesinas!“, corearon en la entrada del complejo educativo, informó Iran International TV.
“Mujer, Vida y Libertad”, el canto que se repite en las calles de Irán.
Los estudiantes también denunciaron que las clínicas lindantes a las universidades afectadas han sido cerradas o se han quedado sin suministros para tratar la deshidratación y otros síntomas asociados de intoxicación alimentaria, en otra señal más de que el brote puede haber sido una estrategia deliberada para frustrar el movimiento nacional de protesta.
A pesar de las respuestas de las autoridades iraníes, los reclamos en las calles se mantienen. Según Kasra Aarabi, líder del programa de Irán dentro del Tony Blair Institute for Global Chang, “el ánimo en las calles es revolucionario”.
“Si bien pueden tratar de reprimir a los manifestantes, no pueden reprimir el ambiente revolucionario“, declaró a la agencia AFP. Mientras tanto, el ex presidente iraní, Mohammad Khatami, salió en apoyo de los manifestantes e instó a los funcionarios a considerar sus demandas “antes de que sea demasiado tarde”.
La organización Iran Human Rights reportó al 29 de noviembre 448 personas asesinadas, incluidos 60 niños y 29 mujeres, brutalizados por las fuerzas de seguridad en las represiones de las protestas. Además, la ONU contabiliza al menos 14.000 detenidos.
Mientras tanto, las autoridades iraníes dieron marcha atrás con la decisión de disolver la Policía Moral del país. Formalmente conocida como Gasht-e Ershad, la Policía de la Moral se estableció en 2006 para hacer cumplir el estricto código de vestimenta para las mujeres, el cual requiere que todas las mujeres utilicen el hiyab en público para cubrirse la cabeza.
Una emisora estatal dijo que “ningún funcionario de la República Islámica de Irán ha confirmado el cierre de la policía moral” y minimizó las palabras de su Fiscal General. “Algunos medios extranjeros han tratado de caracterizar la declaración del fiscal general como la retirada de la República Islámica de su hijab (leyes) e influenciada por los recientes disturbios“, agregó la emisora.
El grupo policial fue severamente apuntado y atacado después de la muerte de la estudiante de 22 años Mahsa Amini bajo su custodia el 16 de Septiembre. Amini, una kurda aspirante a abogada, fue arrestada porque no estaba usando su hijab sobre su cabello, con lo cual habría incumplido el estricto código de vestimenta que impone la dictadura islámica.
Ante la aparición de nuevas figuras públicas iraníes que muestran su apoyo a las protestas, las autoridades han decido atacarlos directamente. Entre ellos, se encuentra la ex estrella de la Selección Nacional de fútbol del país, Ali Daei. El ex delantero, que anotó 109 goles representando a su país en partidos internacionales, dijo la semana pasada que había enfrentado amenazas después de mostrar apoyo público al movimiento contra el régimen.
Una joyería y un restaurante perteneciente a Daei fueron cerrados durante el traslado por las autoridades. Una agencia estatal de noticias dijo: “Tras la cooperación con grupos antirrevolucionarios en el ciberespacio para interrumpir la paz y los negocios del mercado, se emitió una orden judicial para sellar Noor Jewelry Gallery“.