¿Eurasia contra Anglolandia?
El proyecto euroasiático como rival de la hegemonía occidental tiene el grave defecto de las enormes diferencias culturales entre Rusia, China y la India, pilares del proyecto; mientras que el llamado Occidente (al que culturalmente pertenece Rusia), a pesar de sus grietas internas, tiene además de ventaja económica por ahora, un grado mucho mayor de homogeneidad política e histórica, hoy dominada por Anglolandia en la OTAN y en la UE. La mayor población del bloque euroasiático es una baza, pero poco decisiva. Por eso creo que la opción de Putin solo puede funcionar táctica, pero no estratégicamente, y solo por un tiempo. Como se comprueba cuando los supuestos aliados chino e indio, a su vez poco amigos entre sí, están dando una de cal y otra de arena en relación con Ucrania.
El problema se centra en que ha sido Anglolandia la que ha ido expulsando a Rusia de Occidente con una política de provocaciones y ahora con la guerra de Ucrania. Putin lo ha explicado de manera concreta en relación con Ucrania, y de manera mucho más general en relación con la ideología angla. Respecto a Ucrania resumió en su reciente discurso: El único actor mundial interesado en prolongar la guerra en Ucrania es EEUU, motivo por el cual hizo descarrilar las negociaciones entre ambos bandos llevadas a cabo antes de verano en Turquía en las que Ucrania habría accedido a no entrar en la OTAN, a aceptar el statu quo de Crimea y el autogobierno del Donbás, ya reconocido en los Acuerdos de Minsk II del 2015. Fácilmente se observa que Usa está haciendo un negocio fantástico con la guerra, tanto en términos económicos como políticos: económicamente ingresa hasta el triple que Rusia por la subida de precios del gas y otras materias; y políticamente desgasta a Rusia hasta extremos que pueden provocar su quiebra. Si bien la guerra no está aún resuelta.
Y con respecto a la ideología angla, también la ha resumido bastante bien Putin: Al caer la URSS se creyeron la voz de Dios sobre la tierra, y que no tenían responsabilidades, sino solo intereses; y que estos intereses eran sagrados. Creo que lo hemos comprobado con sus aventuras en Irak, Afganistán, Libia o Siria. Y ahora en Ucrania. Todas en nombre de la democracia y con falsos pretextos. Las cuatro primeras han resultado muy costosas y perjudiciales para sus intereses, pero en Ucrania esperan salirse con la cuya. Y de momento van avanzando en ello.












Aunque, en líneas generales, comparto ese breve análisis, hay algo en lo que estoy en profundo desacuerdo. Dice D. Pío Moa : “Usa está haciendo un negocio fantástico con la guerra, tanto en términos económicos como políticos: económicamente ingresa hasta el triple que Rusia por la subida de precios del gas y otras materias; y políticamente desgasta a Rusia hasta extremos que pueden provocar su quiebra. Si bien la guerra no está aún resuelta.” Parece que se le olvida algo fundamental. Y es que Rusia es autosuficiente en una proporción muy superior a la que llegó a ser España tras… Leer más »
Rusia perdió Ucranía en la revuelta de la Plaza Maidán. Debería haberla aplastado como China aplastó las que le organizaron. España debe aprender esa lección. Y aplastar toda revuelta que le organizen.
Aplastar, aplastar y aplastar.
USA, no tiene amigos, sólo intereses… veremos cómo acaba esto, viendo la salida exprés de lis USA de Afganistán, dejando a la gente con él c..o al aire,y el “asesoramiento” de la CÍA…,
Ahora triunfa lo grande: grandes Empresas de grandes Naciones. El Brexit es pro-angloamericano. Y los paises europeos no van a ceder ni en soberanía ni en nada. Casi todos forman parte de la OTAN. El siglo será de los grandes: USA, Brasil, Rusia, China, India. Los pequeños serán absorbidos: Ucranía, Taiwan.
Pues mal, mejor dicho, fatal, por la bajeza de sus intereses, siempre centrados en el dinero y nada más, la mezquindad de todos ellos, sólo hay que ver sus actuaciones, y su miserable estrategia que arrasa con todo sin contemplaciones, y, el caos que dejan a su paso con la consiguiente desesperación de los infelices que, sin comerlo ni beberlo, han de soportarlo y, sobre todo, las impredecibles consecuencias que sin duda se darán..