¿El conflicto de la selección femenina de fútbol desde una perspectiva de género?
Irene Paredes, capitana de la selección y Jorge Vilda, seleccionador, con caras largas en el homenaje a las campeonas del mundo sub-20.
AD.- El fútbol femenino, pese a carecer de interés para el aficionado, intenta ser implementado en la sociedad con un descomunal apoyo institucional, económico y mediático. El fútbol femenino es al fútbol de siempre lo que un pito de carnaval a un trombón. El fútbol femenino desmiente la propaganda feminista de que la mujer puede igualar e incluso superar al hombre en actividades que siempre se ha considerado propias de varones. Al final, la desigualdad natural siempre se impone, y por eso el fútbol femenino carece de la intensidad, la fuerza y la potencia que atrae a millones de aficionados. De igual forma que hay un sinfín de actividades (incluidas las intelectuales) para las que la mujer está mejor dotada que el hombre. Al final, el deporte con perspectiva de género choca de bruces con la realidad.
En un amistoso celebrado en agosto de 2021 se enfrentaron el Athletic de Bilbao femenino y el equipo cadete del conjunto vasco y, tras 90 minutos, el marcador reflejó un contundente 0-6. Un resultado que sorprendió, pues el Athletic de Bilbao fue quinto en la pasada Liga Iberdrola y es un equipo profesional, mientras que el cadete A está formado por jugadores de entre 14, 15 y 16 años.
No fue la primera vez que un equipo masculino de jugadores en formación vence a un equipo femenino de las altas esferas. En 2017, por ejemplo, el cadete del FC Dallas venció 5-2 a la selección femenina estadounidense , actual campeona del mundo y uno de los combinados punteros del fútbol femenino.
Aunque rebase los límites de la incorrección política, debe aceptarse la realidad. El fútbol femenino nunca será rentable para los clubes. Solo hay que ver la escasa asistencia a los campos de fútbol donde se disputan encuentros de la Liga Iberdrola. Para mantenerse, el fútbol femenino necesita ser subvencionado con fuertes cantidades que salen de los bolsillos de los españoles. Por eso no se entiende la propuesta de que las jugadoras cobren sueldos equiparables a los jugadores de la Liga.
En ocasiones, el fútbol femenino es más noticia por lo que pasa fuera que dentro del recinto de juego. Es lo que ha ocurrido con la selección española femenina de fútbol, que vive una rebelión de un grupo de jugadoras contra el seleccionador Jorge Vilda. Las internacionales sublevadas dicen no estar de acuerdo con los planteamientos tácticos como con su metodología y su gestión del grupo. No recordamos que un grupo de futbolistas se haya sublevado contra un entrenador solo porque sus tácticas y técnicas de entrenamiento no sean de su gusto. Es una actitud de arrogancia extrema que unas deportistas mediocres le digan a un entrenador experimentado y curtido en mil batallas cómo tiene que hacer su trabajo.
Afortunadamente, la confianza del mandamás federativo en el técnico no ha sucumbido al pulso de las jugadoras y se mantiene intacta. Vilda fue renovado hasta 2024 antes de la Eurocopa y cuenta con el respaldo de la dirigencia federativa. “Estoy muy orgulloso de ser presidente de la Federación. Hay que reconocer que se ha apostado por el femenino. Recuerdo una llamada de Vilda en plena pandemia para seguir invirtiendo en esta parcela. Y se hizo. Se tiene a los mejores entrenadores, los resultados llegan. Estoy seguro de que también llegarán en la absoluta”, afirmó recientemente el presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales.
Si estas jugadoras díscolas quieren de verdad defender la dignidad de las mujeres deportistas, lo que tienen que hacer es dejar de cuestionar al bueno de Vilda y pedirle a las nadadoras que se planten y dejen de competir en tan desigualdad de condiciones con un hombre al que la ingeniería social hace pasar por mujer. ¿Para cuándo el necesario rearme moral de las principales damnificadas por un sistema cruel y perverso que permite a un hombre humillar a las mujeres en competiciones deportivas? ¿Por qué callan las jugadoras de la selección cuando es cuestión de tiempo que ellas también tengan que enfrentarse a unas reglas de juego que se burla de la naturaleza y denigra a las mujeres?
Todos sabemos que el fútbol femenino es un fiasco, como lo son las mujeres mineras, pescadoras, etc., pues lo que la biología no da, no lo da “la perspectiva de género”.
En segundo lugar, estas zagalas lo que quieren es una entrenadora femenina, y si es lesbiana mucho mejor, para que las “atienda” cuando estén desaminadas, pierdan los partidos, etc.
El único problema es que, con tantas jugadoras, va a tener que hacer horas extras…
Para marimachos aquellas atlétas gruesas y bigotudas de la URSS y la RDA.
La biología es la que es, y la musculatura que es atractiva en un hombre, deja de serlo en una mujer. Nadie en su sano juicio contrata a amujeres albañiles para construir obras, y como eso todo. Muchas mujeres en las policía , pero ninguna en los cuerpos de antidisturbios o en la valla de Melilla. El mismo Zelensky dejó escapar a todas las mujeres, pero puso controles férreos en las fronteras para que no escapara ningún hombre. Dejemos a la biología ser lo que es y disfrutemos con el sexo que Dios nos ha dado, complementándonos entre nosotros.
Totalmente de acuerrdo con usted.
Vid. el genial libro SEXO Y CARÁCTER, que les recomiendo.
Ignoro si hay alguna edición reciente, pero se puede adquirir por internet, no sabemos por cuanto tiempo…
Exactamente. Y todo lo demás son marimachos. El lugar de la mujer es la familia cristiana.
El problema es que hoy en día, muchas mujeres quieren SER HOMBRES, y eso, biológicamente, es imposible…
(Ya lo decía Freud).
Hay que comprender dos aspectos: El primero es la (deficiente) educación que, en general, se viene impartiendo a las jóvenes generaciones. Los han llenado la cabeza con pájaros y que el maná te cae del cielo. Pero la constancia, el sacrificio o la disciplina no suelen entrar ya en el vocabulario. El segundo es que a ese entrenador le tratan de hacer la cama y humillar como a Lucas Mondelo (anterior seleccionador de baloncesto femenino).Como afirmaba el antiguo proverbio: “Si eres demasiado dulce serás tragado (te comerán). Si eres demasiado amargo serás escupido.” Si no aceptas al entrenador propuesto, en… Leer más »
Me congratulo de que traiga a capítulo en este foro la obra del genio
Otto Weininger “Sexo y carácter”, Pilar. Es un tratado definitivo sobre
la materia
Gracias, amigo.
Sin duda alguna…
Y lo cierto es que no interesa a nadie,e o a casi nadie, porque son mucho peores jugadoras que los hombres.
La biología no engaña, y los hombres son mucho más fuertes que las mujeres, en términos generales, y salvo alguna rara excepción.
El 2⁰ instinto masculino es la defensa y el femenino, el instinto social.
En ambos campos predominan unos y otras, con distintas cualidades físicas y mentales.
Ignorarlo es pretender cambiar la naturaleza de los seres humanos, lo que llevaría a generar monstruos.