Se cumplen dos semanas de protestas en Irán: La hija del expresidente Rafsanyaní fue arrestada por la policía
Santiago Vera García.- En el contexto de revueltas en todas las ciudades más importantes del país, incluida la capital, Teherán, las autoridades arrestaron a la hija del expresidente Akbar Hashemí Rafsanyaní por incitar a las protestas.
Los iraníes organizaron el martes una doceava noche consecutiva de protestas por el asesinato de Mahsa Amini, asesinada por la policía moral del régimen por no usar hijab, desafiando una represión cada vez mayor de las fuerzas de seguridad iraníes.
La policía moral es una fuerza creada directamente por el Ayatolá y es responsable de garantizar el respeto de la moral islámica descrita por las autoridades clericales del país, siguiendo la Ley Sharia al pie de la letra según la interpretación del régimen iraní.
La agencia de noticias iraní Fars dijo que alrededor de 60 personas habían muerto en las protestas desde el 16 de septiembre. Un número mayor está dando la organización Iran Human Rights (IHR), con sede en Oslo, dijo que al menos 76 personas han muerto en la represión.
A esto se le suma el dato que publicó la policía el lunes sobre que habían realizado más de 1.200 arrestos, entre los que se encuentran tanto activistas, abogados y periodistas como diversos manifestantes.
Mujeres que lideran las protestas fueron arrestadas en masa.
En este contexto de revueltas en muchas de las ciudades más importantes del país, incluida la capital, Teherán, las autoridades iraníes arrestaron a la hija del expresidente Akbar Hashemí Rafsanyaní por incitar a las protestas, confirmó la agencia de noticias Tasnim.
“Faezeh Hashemí, la hija del ex presidente Akbar Hashemí, ha sido arrestado en el este de Teherán por una agencia de seguridad por incitar a los alborotadores a las protestas callejeras”, informó Tasnim, sin dar más detalles.
No es la primera vez que Hashemi, ex legisladora y activista por los derechos de las mujeres, tiene enfrentamientos con las fuerzas de seguridad iraníes por incumplimientos de ley en la república islámica.
En julio de este año había sido acusada por el régimen de llevar a cabo actividades de propaganda contra el país y blasfemia en comentarios en las redes sociales. Además, Hashemi criticó duramente al gobierno de Biden por quitar a la Guardia Revolucionaria de la lista de organizaciones terroristas y dijo que la decisión es “perjudicial” para los intereses nacionales de Irán.
Quien es Akbar Hashemí Rafsanyaní
El ayatolá Rafsanyaní presidió Irán entre 1989 y 1997, durante una serie de reformas progresistas que acompañaron la caída de la Unión Soviética y el Consenso de Washington. Rafsanyaní es el único mandatario de Irán que habló en favor del capitalismo, y privatizó varias empresas estatales.
Su presidencia comenzó al mismo tiempo que el mandato de Alí Jamenei, quien sucedió al gran ayatolá Ruholá Jomenei en 1989. Jamenei le entregó más poder al presidente de la Nación y lo convirtió en un jefe de Gobierno con los mismos poderes que muchos de los países presidencialistas del resto del mundo.
Muchas de las reformas que impulsó Rafsanyaní están siendo retrocedidas por el actual presidente Ebrahim Raisi, un ultra-conservador que fue el verdugo de la Masacre de 1988. Casi 4.000 opositores al régimen fueron condenados a muerte en juicios que presidió Raisi por disidencia a la República Islámica.
Raisi planea dar un discurso televisivo a la nación este miércoles en medio de la ola de disturbios antigubernamentales, con manifestantes coreando “Muerte al dictador” y “Mujer, Vida y Libertad”.
A pesar de un creciente número de muertos y una feroz represión por parte de las fuerzas de seguridad utilizando gases lacrimógenos, palos y, en algunos casos, munición real, los videos de las redes sociales mostraron a los iraníes persistiendo en las protestas, a menudo pidiendo el fin de las más de cuatro décadas del establecimiento clerical islámico en el poder.
La policía antidisturbios con chaleco antibalas negras ha golpeado a los manifestantes con porras en batallas callejeras, mientras que los protestantes han derribado grandes imágenes de Ali Jamenei y su difunto predecesor, el ayatolá Ruholá Jomeini.
Además, la élite de la Guardia Revolucionaria de Irán dijo el miércoles que dispararon misiles y drones contra objetivos militantes en la región kurda del vecino norte de Irak, donde un funcionario dijo que nueve personas murieron. De esa zona provenía la mujer asesinada por la policía moral.
Con respecto al Kurdistán iraní, el grupo iraní de derechos humanos Hengaw dijo que 18 personas habían muerto, 898 resultaron heridas y más de 1.000 manifestantes kurdos arrestados en los últimos 10 días, pero estimó que las cifras reales eran más altas.
El Ayatolá Hossein Nouri Hamedani, un poderoso clérigo chií alineado durante mucho tiempo con el establishment ultraconservador del país ha instado a las autoridades a adoptar una línea más suave. “Los líderes deben escuchar las demandas del pueblo, resolver sus problemas y mostrar sensibilidad hacia sus derechos”, dijo.
El ministro de Salud, Bahram Einollahi, citado por la agencia oficial de noticias IRNA, acusó a los manifestantes de destruir 72 ambulancias, mientras que del lado de los activistas se argumenta que las autoridades han estado utilizando dichas ambulancias para transportar a las fuerzas de seguridad.