Resulta indudable que en el equipazo de Vox Mijas hay mucha necesidad económica. Lo de escribir “Vox Mijas” con bolígrafo sobre la cinta del ramo de la Virgen, solo puede haberse debido a que Vox Mijas lo compone una banda de tiesos, a un soberano exceso de mal gusto o posiblemente, lo peor de todo, a una mezcla de ambas cosas.

Siendo justos, al menos he de decir que contrariamente a lo que sería de esperar, no han utilizado el bolígrafo rojo.

En el centro la portadora, vicepresidenta de la gestora de Vox Málaga, doña Carmen barrios, que junto a otros nativos de Fuengirola, se postula a la alcaldía de Mijas, como mi buen amigo Pablo Sáenz o el marbellí, que no marbellero, Santi, conocido entre la menguante afiliación como el “mocito feliz”. No sé por qué pero mi amigo Pablo Sáenz me recuerdo mucho el “Llanto de las virtudes y coplas por la muerte de don Guido”, de Antonio Machado:

Gran pagano,
se hizo hermano
de una santa cofradía;
el Jueves Santo salía,
llevando un cirio en la mano
—¡aquel trueno!—,
vestido de nazareno.

Un equipazo sin duda para Fuengirola, dónde les conocen muy bien, especialmente en los sectores hosteleros y del ocio nocturno. Si bien me parece un bonito gesto para con la virgen, me gustaría recordarle a estos fuengiroleños que los santos no aceptan ni sobornos ni chantajes.

Que se vayan a su pueblo, que aquí en Mijas no se va a producir ningún milagro.

*Ex coordinador de Vox en el municipio malagueño de Mijas.