José Luis Martínez Almeida, “Carapolla”, nunca se atrevería a llamar “bastardos” a los musulmanes residentes en España
AD.- La guerra en Ucrania ha hecho que muchos gobiernos, instituciones y compañías reaccionen y muestren su posición contraria a la invasión llevada a cabo por Rusia, rechazando productos, empresas o locales de origen ruso e incluso a sus propios ciudadanos, aunque no tengan nada que ver con la política del presidente Vladímir Putin.
A confesión de partes, relevo de pruebas, este axioma jurídico calzó con la descarga rusofóbica del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, al caer en una broma realizada por los célebres comediantes rusos Vován y Lexus.
El regidor de la capital española recibió una llamada de broma de una persona que decía ser el alcalde de Kiev, Ucrania, Vitali Klitschko, y en el transcurso de la conversación dejó al descubierto dejó su postura antirrusa. La conversación se llevó a cabo en inglés.
«Creo que es necesario castigar a los bastardos rusos, tanto en España como en Madrid. Y, por supuesto, estamos haciendo todo lo posible para eso», enfatizó José Luis Martínez-Almeida, quien pidió mayor intervención de las fuerzas españolas para ayudar a las tropas Ucranianas contra Rusia.
El troleo hacia el alcalde de Madrid denota la xenofobia hacia el exterminio de los rusos de este mamarracho. Llamar “bastardos” a los casi 100.000 rusos que viven en España solo puede ser fruto de una mente podrida. De la misma forma que los hijos no son responsables de las acciones de sus progenitores, los rusos que viven en España no son culpables de las decisiones de Putin. Nos gustaría que tan severo correctivo a la comunidad rusa por la acción de Putin, tuviese idéntico correlato con la comunidad musulmana en España cada vez que los islamistas llevan a cabo una matanza. Pero no lo hará. A “Carapolla” le faltan cojones pero no es tonto. “Carapolla” sabe que la comunidad rusa en España es ordenada y pacífica, y entre todas las opciones, preferirá la de ser un canalla cobarde a terminar sufriendo un correctivo a lo Salman Rushdie.
Miles de rusos pagan sus impuestos en España y otros tantos cientos de miles de turistas procedentes de Rusia han regado de divisas la industria turística de nuestro país. Los rusos que viven en España no hacen cola en las oficinas del INEM, no recurren a las ayudas sociales, no parasitan los fondos públicos y, por si fuera poco, nos regalan el precioso tesoro de su acervo genético. En las crónicas de sucesos no verán ustedes un nombre eslavo asociado a una violación en manada, a una reyerta navajera o a un acto blasfemo contra los católicos. Son y representan una comunidad culta, laboriosa, civilizada y respetuosa con el país que los acoge. La ejemplaridad de la comunidad rusa esta muy por encima de la acreditada por Almeida, cuya propensión al bienquedismo quedó acreditada en la broma telefónica, de igual forma que su pulsión traicionera quedó retratada en el frustrado homicidio político de Ayuso, del que formó parte, aunque el gusano supo desmarcarse a tiempo.
Madrid no puede estar gobernada por quien tanto la deshonra. Porque lo más grave de todo es que el regidor madrileño, cuando aún no conocía del engaño, prometió al falso Vitali Klitscko, el edil de la capital de Ucrania, ayudar en la deportación de ciudadanos ucranianos refugiados en España para que combatieran en la guerra contra Rusia, al considerar que «se necesitan aún más soldados para luchar contra Rusia». Y tiene gracia esta prodigalidad belicista (eso sí, a condición de que los muertos sean siempre otros) en boca del mequetrefe al que no nos sería difícil imaginar invitando a café al hombre pillado in fraganti horadando su honra.
Da igual las excusas que ofrezca a la comunidad rusa en España. Almeida ha exhibido al natural al cobarde y canalla ahíto de sangre que lleva dentro. Y que no nos venga ahora con que se trató de unas manifestaciones en un contexto de chacota. Unos hacían una “broma” pero, al otro lado, Almeida respondía en serio. Ofrecer apoyo para deportar ucranianos al frente o castigar a rusos “bastardos” definen plenamente al personaje que los madrileños tienen al frente de su alcaldía.
Un último apunte con interrogante: los bombardeos estadounidenses en Siria, Somalia e Irak, entre otros, ha causado miles de víctimas inocentes. ¿Se atrevería “Carapolla” a frivolizar sobre la deportación de los norteamericanos residentes en España para que se sumen a la supuesta guerra contra el Estado Islámico? ¿Ustedes qué opinan?
¡Muchísima gente enfadada con Almeida!
‼️ Compartimos la indignacón de nuestros compatriotas, muchos de los cuales han encontrado su segunda patria en España, por las palabras insultantes en relación con las personas de nacionalidad rusa pronunciadas por el Alcalde de Madrid, ciudad que pretende ser una de las más friendly del mundo según su eslogan «Sin ti, Madrid es menos Madrid».
La carta de la Unión de Organizaciones de Compatriotas Rusos en España y Andorra para el Alcalde de Madrid, se puede encontrar en versión pdf en numerosas webs.
Cien mil rusos residentes, han pedido a Carapolla, que no les llama bastardos, y que se limpie la cebolla, con un puñado de cardos. El alcaldito dentón, consuma nueva traición, nombra hija predilecta, a una pájara muy abyecta. Y este pitufo mamón, nunca pierde la ocasión, de hacer el tontorrón, si sale en televisión Y como es muy puñetero, no saca pan de pedruscos como hacían los cataluscos,… nos vacía el monedero. Nos fríe con multa y tasa, el conductor perseguido, el viajero apretujado, y encima nos da la brasa. Y aprueba sus presupuestos, comprando las voluntades, como hacen los deshonestos,… Leer más »
“Los delitos de odio tienen lugar cuando una persona ataca a otra motivada exclusivamente por su pertenencia a un determinado grupo social, según su edad, sexo, género, religión, raza, etnia, nivel socio-económico, NACIONALIDAD, ideología o afiliación partidaria, discapacidad u orientación sexual.” (Wiki)
Martínez Almeida ha cometido un flagrante delito de odio. ¿Actuará la Fiscalía del Estado?
El odio es un sentimiento –por tanto no debe ser un delito– que se incluye dentro de lo moral, ético e incluso civico, pero en modo alguno debe caer dentro del Código Penal. Lo que llaman ‘discurso de odio’ significa, en realidad, en la inmensa mayoría de los casos, tener una opinión diferente, pero ‘el discurso de odio’ ha sido elevado a la categoria de ‘trampa saducea’ mediante la cual si no te gustan las sociedades multiculturales, multiétnicas, si no te gusta el ‘dia del orgullo gay’, si no compartes la aceptación de lo ‘trans’ o lo ‘quer, si estás… Leer más »
Totalmente de acuerdo. Uso la expresión contra Mtz Almeida porque este señor es del club de “los buenos”. Y así se permite despreciar a un colectivo, una nacionalidad, solo porque ahora al dictado de la OTAN está de moda hacerlo en los corruptos medios occidentales, con lo que se revela la hipocresía y las contradicciones de esta gentucilla. Pero obviamente la expresión “delito de odio” es ya en sí grotesca, entre el fariseísmo y el rousseaunismo. No se puede legislar sobre los sentimientos… a no ser que estemos ante una nueva Inquisición laica o en los Procesos de Moscú de… Leer más »
Carapolla, es un aborto fallido, basta con mirarle a la cara para ver que no es normal. Y si debería pedir perdón a la comunidad rusa por los insultos dichos por el.
A si que carapolla si lees esto ten un poco de hombría y pide perdón a la comunidad rusa en España. Aunque dudo mucho que la hombría dispongas de ella.
El PP al igual que el PSOE están para obedecer.
Son un instrumento al servicio de las elites supranacionales.
Estamos ante el fin de los estados nación.
Algunos llevamos años advirtiéndolo. Sólo había que leer a Atali
ADMINISTRADOR: Aquí no nos importa si a usted le gustan o no los rusos.