El presidente de la asociación Dignidad y Justicia, Daniel Portero, ha declarado que el traslado de la cárcel de Logroño a una del País Vasco de Juan Antonio Olarra Guridi, el etarra que ordenó matar a su padre, el fiscal jefe de Andalucía en el 2000, Luis Portero, “muestra la sumisión del Gobierno de Sánchez a Bildu”.

En un comunicado afirma que considera “una tomadura de pelo la política carcelaria del Gobierno” y critica que haya decidido trasladar al centro penitenciario que corresponda del País Vasco al que fuera dirigente de ETA Juan Antonio Olarra Guridi.

Recuerda que este terrorista fue condenado a 30 años de prisión por ordenar el asesinato de su padre.

A juicio de Daniel Portero, “este movimiento responde a una reacción del Gobierno a las querellas que la asociación ha interpuesto en la Audiencia Nacional que han provocado la reapertura de siete causas contra los jefes de ETA, entre ellas la del asesinato del concejal del PP en Ermua (Vizcaya) Miguel Ángel Blanco”.

Comenta que precisamente ello ha provocado que este jueves el exlíder de la banda terrorista Mikel Antza haya acudido a declarar como investigado ante el tribunal.

A su juicio, la coincidencia entre la orden de acercar al etarra Olarra Guridi con la vista de Mikel Antza en la Audiencia Nacional no es causal, y “esta decisión -señala- muestra con meridiana claridad la sumisión del Gobierno a Bildu”.

Insiste Portero en que “mientras Dignidad y Justicia está tratando de encarcelar a los jefes de ETA por ordenar asesinatos el Gobierno se dedica a beneficiarles, a acercar a esos mismos dirigentes, porque Olarra Guridi era miembro de la cúpula, para satisfacer a Bildu”.