El presidente de VOX, Santiago Abascal, ha denunciado este sábado, desde Las Palmas de Gran Canaria, la realidad de la inmigración ilegal -foco de inseguridad y pobreza- que el consenso político-mediático pretende ocultar.

Tras asistir a la clausura del Congreso ‘Frontera Sur’, organizado por VOX y el grupo europeo de Conservadores y Reformistas (ECR), el presidente de VOX, Santiago Abascal y el secretario general de la formación , Javier Ortega, han pronunciado un discurso ante los centenares de personas que se agolpaban en el conocido como Parque Blanco de la isla.

“¡Las elites globalistas han rendido la frontera sur!”, ha comenzado el presidente de VOX, que ha reivindicado para Canarias una política de fronteras seguras. Abascal, que ha relatado cómo esas élites globalistas han abierto las puertas de los barrios, pueblos y ciudades a una “inmigración descontrolada que amenaza la seguridad de las familias”, ha denunciado el consenso existente desde los sindicatos hasta la patronal; desde el PP hasta Podemos; de los pijos progres que señalan, desde sus barrios de lujo, a quienes disienten del consenso, llamándolos egoístas o xenófobos. “La inmigración y el islamismo son un problema real”.

No en vano, por Canarias -destino principal de las avalanchas migratorias-, entran “aspirantes a terroristas” y los menas que atemorizan a ancianos, mujeres y jóvenes en las calles y parques de toda España. “Nunca -ha añadido Abascal- ha habido un foso tan grande entre las élites y la realidad. Menos relatos falsarios y más escuchar la calle”.

El presidente de VOX, que ha reconocido la desesperación de muchos de los jóvenes que se lanzan a la inmigración irregular, de la que culpa a las mafias, ha defendido -frente a la manipulación de los medios de comunicación- la inmigración legal, de quienes, junto con los españoles, contribuyen a sacar España adelante.

“Menos poemas y más escuchar a los vecinos de Arguineguín, a los de Rehoyas, a los de La Isleta, a los de Maspalomas, a los de El Lasso”, ha resumido el presidente de VOX, que ha relatado cómo los vecinos de los barrios normales están hartos de las peleas, de la trata de personas, de las bandas callejeras, de los robos a plena luz del día, de los atracos…”.

Frente a la desidia de los gobiernos y el silencio de los medios, VOX afirma que las pateras no pueden seguir siendo el caballo de Troya para la entrada de criminales y yihadistas.

Así, frente a la realidad, VOX propone soluciones. Soluciones recogidas en la Agenda España y que pasan por:

-El endurecimiento de controles fronterizos y la reforma del Código Penal
-La expulsión de inmigrantes ilegales y de aquellos legales con delitos graves
-El cumplimiento de las penas en los países de origen
-La clausura de los centros de MENAs
-El aumento de efectivos policiales en los barrios
-La persecución efectiva de las mafias
-La exigencia a los burócratas de Bruselas “para que guarden las fronteras y no dejen a los pueblos del sur de Europa, como los griegos, los italianos o los españoles, el caramelo envenenado de la inmigración ilegal”. “El Sur de Europa ya no aguanta más”.

Ni Molenbeek ni Amsterdam

El modelo de VOX, ha dejado claro Abascal, no es “ni Molenbeek, ni Amsterdam”, ni la periferia de las ciudades suecas, ni esos más de 100 barrios franceses en los que impera la Sharia en lugar de las leyes civiles de la República. “No queremos territorios de espaldas al Estado”.

“VOX no quiere fundamentalismo islámico, imanes radicales, intolerancia hacia mujeres y homosexuales… VOX no quiere problemas de adaptación, formación de guetos, obstáculos para el progreso escolar de los niños autóctonos, prácticas ilegales como los matrimonios concertados con niños o la ablación femenina. VOX no quiere una amenazante sustitución poblacional que ya es una realidad en algunos puntos de Europa. Sería la muerte de nuestra civilización”, señaló.

La realidad de la inmigración

A juicio de VOX, la inmigración ilegal es tremendamente lesiva para la economía local y el bienestar de los españoles. No sólo porque los inmigrantes irregulares se ocupan en trabajos de economía sumergida y hacen competencia desleal a los pequeños comerciantes.

Canarias, con un paro juvenil del 55%, y un mercado laboral que nada en la precariedad, no puede resistir más avalanchas migratorias. “No vienen a pagarnos las pensiones. Eso podemos hacerlo nosotros solos si racionalizamos el Estado y revertimos el dramático invierno demográfico”, ha recordado Abascal a los canarios, a los que ha prometido no dejar solos.