Muchos se temen lo peor en las elecciones del 4 de mayo. La sombra del pucherazo cabalga abarca cada vez a más personas. El CIS de Tezanos encendió ayer todas las alarmas al pronosticar que Ayuso podría perder el Gobierno regional en beneficio del bloque comunista. Algunos interpretan este sorprendente anuncio como una estrategia de la persuasión: que la opinión pública interiorice como factible un resultado electoral favorable a la izquierda, que aún hoy sigue pareciendo impensable.

¿Fraude electoral a la vista? 

Las apelaciones de Pedro Sánchez en favor del voto por correo no ayuda preciosamente a disipar las sospechas. El voto por correo carece de cadena de custodia. No hace mucho Sánchez nombró director de Correos a Juanma Serrano, quien fue durante años el jefe de gabinete del presidente durante su etapa como secretario general del PSOE. Pero cuando este llegó a La Moncloa, nombró director del Gabinete de Presidencia a Iván Redondo.

Como premio de consolación, Sánchez situó a Serrano, de su máxima confianza personal, como presidente de Correos, con un sueldo anual que dobla y supera al del presidente del Gobierno: 200.000 euros.

La poca credibilidad del Gobierno no contribuye al reforzamiento de la confianza de muchos españoles en sus instituciones democráticas. Se les ha mentido y engañado tanto que es lícito que se pregunten si en Madrid se podría producir “lo mismo” que en Venezuela y en Estados Unidos con los resultados electorales. Marlaska no puede contar los votos del 4M. Esto es como los votos en Venezuela o en Estados Unidos, cuando a las 4 de la mañana se fue la luz y cuando volvió a las 5 se había dado la vuelta al escrutinio.

¿Se pondrá el servicio nacional de Correos, con todos sus gigantescos recursos, en contra de Ayuso para evitarle a Sánchez el ridículo de perder Madrid, entreabriendo las puertas de Moncloa a Pablo Casado?

También se advierte acerca de las trampas que se pueden hacer a través de la digitalización electoral. Juan Manuel Serrano puede ser la mano que podría ayudar a la izquierda a hacerse con la Puerta del Sol. De entrada, resulta sospechoso que los partidos que “pretenden destronar a Isabel Díaz Ayuso pidan a los madrileños a que voten por Correos.

Los exdiputados de Ciudadanos, Marcos de Quinto y Juan Carlos Girauta, reaccionaron a la información de Rubén Sánchez, secretario de Facua-Consumidores en Acción, sobre la posibilidad de votar por correo. Mientras De Quinto señalaba que ya se puede pedir el voto por correo para “que se pueda manipular a nuestro antojo”, Girauta espetó que era “rarito”.

El fantasma del fraude electoral por el voto telemático está empezando a calar en la opinión pública alentado por los datos de las encuestas que dibujan un panorama equilibrado entre derecha e izquierda y prevén una participación histórica.

Así las cosas, hay quienes creen que en Madrid podría producirse un vuelco electoral tan fraudulento como el que tuvo lugar en Estados Unidos. La asfixiante imposición de una narrativa cada vez más visiblemente alejada de la realidad acaso comenzara ayer con la encuesta de Tezanos.