Luis Romero.- Aullidos. Música de cabecera del programa “El hombre y la tierra” y la voz de Félix Rodríguez de la fuente, retransmitiendo: El lobo ibérico denominado por el famoso naturalista Cabrera, Canis lupus signatus, como consecuencia de la línea negra que tiene en la cola, parte anterior y cruz, es un hermoso animal de tamaño medio.

En la fresca mañana el lobo monta la guardia en el alto y tupido sabinar, vigila lo que sucede a su alrededor. Antonio Luna, cual lobo, fichando a su manada como un ente superior, desde su posición, controla mediante contacto visual, todo lo que se mueve en Vox Málaga.

Pero el lobo aparte de la faz, cuenta con otro elemento de su anatomía mucho más visible para expresar su dominancia. Me refiero a la cola. La cola del lobo peluda, llamativa, es llevada siembre enhiesta, como una bandera de dominio por el individuo dominante en el grupo, con la loba como aliada.

No recuerda el lobo tiempo atrás, cuando llevaba la cola baja, metida entre las piernas, una pauta significativa de temor y conducta de sumisión. Entonces no se atrevía a mirar a los ojos, era típico de Luna, su desvío de mirada, manifestado en el lenguaje no verbal.

Si hay alguien en esta gestora que se está regocijando a lo grande, es él, Antonio Luna, el concejal portavoz del GM VOX Fuengirola y vicesecretario de Organización de VOX Málaga. En un principio, se creía que le iban a dar la presidencia de la gestora, pues era el correveydile de Jacobo Vázquez alías el “Chusquero Marinero”, por eso de que en cada puerto tiene una mujer. Pero, tras tenerlo más de un mes de portero, llave va y llave viene desde Fuengirola a Málaga y desde Málaga a Fuengirola, le dan la noticia del nombramiento de Antonio Sevilla. Rabioso, se niega a ir de segundón (Ya lo decía Diego de Acuña en ese verso que tanto gusta a los voxeros “a nadie le da lustre haber nacido segundón en casa grande”) por lo que coloca en ese puesto a su secretaria, amiga y algo más Carmen Barrios.

El “Lobo Luna” es el enlace y el hombre de confianza de la gestora ante toda la estructura del partido en las localidades, lo cual para él es no hacer nada, pues no se ha visto su cola peluda entre los pueblerinos. Su otra labor consiste en liderar y promover las actividades propias de la organización de toda la cadena de los coordinadores locales. Eso sí le gusta, cotillear todos los currículos que le han enviado, para luego colocar a sus amigos y así encubrir su propia mediocridad, debido al miedo y la inseguridad que le provocan las personas preparadas. Por eso rellena las páginas de Vox Málaga de títulos que se resumen en cursillos de CCC, presumiendo de sus cargos, para desviar la atención o desvirtuar las situaciones de riesgo de la gestora, anunciando a bombo y platillo un cargo, cada vez que sobre él se cierne la alargada sombra de desmembrar a la afiliación, como un lobo con sus mandíbulas cerrándose sobre su presa y destrozándola.

Deducimos, que si él se pavonea de sus nombramientos, también debería responsabilizarse de ellos, y hacer lo que todo político honrado hace, cuando mete la peluda pata hasta el fondo, esto es dimitir. Pero, para él, el juego de la caza, es hacer de las víctimas verdaderos chivos expiatorios ante la Organización.

La licantropía está asociada a un cuadro psiquiátrico del trastorno afectivo. Hay personas que se creen lobos e imitan un comportamiento distante, frío, egocéntrico y exigente, cuando en realidad es un gato, restregándose contra los tobillos de su dueño.

Gatos que nunca serán lobos, maderos que no llegan a ser ni aglomerado de chapón, gente que no asume su responsabilidad, y un fin que hasta el buitre presagia.