Alejandro Zamaro

Informamos ayer que mañana sábado está prevista una mesa informativa de Vox Málaga en la localidad costasoleña de Manilva-Sabinillas. “Me han dicho que todos los que acudan a esta mesa, el coordinador de zona que también estará allí invitará a cervezas”, escribió en redes sociales el ex candidato al Senado Sáenz de Tejada, rentista y fiel arquetipo de la derechona torrentiana.

Nos preguntábamos con qué fondos se sufragará el convite cervecero, sobre todo porque el citado coordinador de zona no es otro que Fernando González, el abogado denunciado por presunta estafa de 55.000 euros fruto de una operación para la adquisición inmobiliaria en la capital malagueña. “¿Qué dirá ante semejante despliegue de generosidad el denunciante y víctima de la supuesta estafa, Alejandro Zamaro?”, nos preguntamos también.

La respuesta no se ha hecho esperar. Zamaro ha enviado una carta al director de AD, que reproducimos a continuación:

“Sinceramente, no entiendo qué le pasa por la cabeza a esta persona. ¿Cómo puede dormir tranquilo? ¿Cómo el partido puede tener en sus filas a una persona tan inestable? ¿Qué se pretende todo esto? ¿Comprar legitimidad, comprar tiempo, comprar apariencias, comprar lealtad, comprar adhesiones? ¿Tan incrédula sería la sociedad española? NO LO CREO.

Los argentinos sí somos incrédulos; de hecho yo confié en esta persona y me sacó más de 55.000 euros. Cómo puede tener un partido político, que se supone que representa actualmente la ‘esperanza’ de muchos españoles, a un inmoral confeso, a un potencial delincuente (aunque en unos meses la justicia se encargará de eliminar la palabra potencial), que se ha burlado de colegas y del sexo opuesto, ya que, como sabrás, mi abogada es mujer y esta persona  intentó ridiculizarla por teléfono en varias ocasiones, y a través a través de mail engañosos y embusteros. ¿Eso quiere la sociedad española? ¿Esa es la esperanza para el pueblo? Una persona que se jacta de cometer fraudes al mismísimo estado español y de sacarle dinero a extranjeros, muy conocida por estas situaciones incluso entre sus compañeros, y ahí sigue. No puede ser que yo sea el primero es destapar estos atropellos. ¿Tanto miedo tiene la sociedad a desenmascarar a estos que dicen ser profesionales y luchar por la verdad y la justicia?

Imagínense a esta persona con poder político, Dios mío. Estas acciones son populistas y demagogas, dar migajas (el sobrante) a la sociedad, que encima son ajenas al bolsillo de quien las ofrece, para intentar ganar popularidad, ya que de otro modo solidario, honesto e intelectual nunca lo podría hacer; tratando además a la gente de barata, inculta e ignorante. Pensé que el partido político VOX era de derecha y en cambio lo que está haciendo es apelar a actitudes y acciones de izquierda. No entiendo nada ya, lo único que sé es que el dinero que se destine para el pago de cervezas no será el suyo”.