(El Caso)

Liberan a un anciano de 80 años que hacía tres meses que estaba secuestrado en Silla, un pueblo de Valencia: lo han encontrado desnudo y en condiciones infrahumanas en una barraca del pueblo.

Todo empezó por una sospecha de una vecina de Silla y no dudó en avisar a los agentes de la Policía Local, que se dirigieron hasta el lugar de los hechos, un zulo muy pequeño en las afueras del pueblo. El secuestrador les abrió la puerta y los agentes le preguntaron si vivía solo y él dijo que sí.

No obstante, los policías siguieron insistiendo y, finalmente, él les dijo que, de vez en cuando, venía un amigo de la familia para hacerle compañía. Fue en aquel momento cuando los agentes le volvieron a preguntar si el anciano estaba en la barraca y, a pesar de las mentiras del principio, finalmente, les dijo la verdad.

Inmediatamente, le preguntaron al secuestrador si podían hablar con el anciano y este les dijo que sí. Cuando se dirigieron hasta la habitación donde se encontraba el hombre, no daban crédito a lo que estaban viendo: un anciano de 80 años desnudo de cintura hacia abajo en unas condiciones infrahumanas.

Se quería quedar el dinero de la pensión

El anciano hacía más de tres meses que vivía en el zulo: al principio, se instaló en la voluntariamente, pero cuando quiso marcharse, el secuestrador no le dejó y lo tuvo meses retenido contra su voluntad y todo porque el hombre se quería quedar con el dinero de su pensión.

El secuestrador no le dejaba ni ir al lavabo y tenía que hacer sus necesidades en un cubo y, por si no fuera poco, solo lo dejaba salir a pasear unos minutos al día, siempre que lo hiciera bajo su vigilancia, según informa Espejo Público.