El Circo de “Barbie”, pasen y vean: Pablo Sáenz de Tejada o el arte de decir Diego donde dije digo
Jesús Córdoba.- El erratismo en Vox Málaga no es solo conceptual, afecta también a los fundamentos de muchos de sus miembros. El arte de sostener una cosa hoy y mañana la contraria es tan habitual en ellos que raro sería verles mantener una actitud de coherencia intelectual, si fuera lícito que el intelecto pudiera asociarse a estos prendas. Uno de los ejemplos más claros de cómo la dignidad está reñida con la coherencia nos lo ofrece el ex candidato de Vox al Senado por Málaga, Pablo Sáenz de Tejada. Ayer terció en uno de los numerosos frentes que el director de AD, Armando Robles, tiene abiertos con miembros que han sido o son destacados en el partido. Concretamente puso su sello personal en una crítica en redes sociales de Macías, nombrado recientemente coordinador de zona, contra Alerta Digital.
Esto es lo que el candidato al Senado dejó escrito a modo de respuesta: “Tuve el privilegio de conocer y trabajar codo con codo con José Antonio Macías. Una persona noble y principios elevados que en su día se apartó en silencio, como hacen los caballeros. Cuanto me alegra que vuelva a regalarnos su talento (sic) y bondad desde el organigrama de los Valientes de Málaga”.
Aunque el panegírico puede resultar enternecedor, no lo sería tanto a la sombra de otro escrito, este en forma de misiva, del mismo Sáenz de Tejada, esta vez en defensa del concejal y ex coordinador de Vox en Benalmádena, Miguel Ángel Jiménez, y que fue enviado al Comité de Garantías del partido. En ese escrito, datado el 17 de octubre de 2020, Sáenz de Tejada se metamorfosea y no se deduce que la figura de Macías le inspirara las mismas lisonjas que le dedica tres meses después.
En su condición entonces de ex vocal del CEP de Vox Málaga, Sáenz de Tejada manifestó en su misiva: “Solo vi un problema en Miguel Ángel durante su período de coordinador: su excesiva confianza en las personas; las que le rodeaban y otras que iba conociendo sobre la marcha. Fue ya entonces en el 2019, tras las elecciones generales y previo a las locales, que los dos primeros de su lista electoral, José Antonio Macías y Gema Carrillo, comenzaron a dar informes negativos al CEP sobre Miguel Ángel y ante el estrés al que se veía sometido el presidente, trató con suma desconfianza a Miguel Ángel (…) Estoy completamente seguro que las sospechas de Gema Carrillo y José Antonio Macías sobre su honestidad (la de Miguel Ángel) estaban completamente infundadas y solo se debieron por su excesiva confianza en la bondad de las personas. Y no, no todo el mundo es bueno”. Antológica muestra de ubicuidad en el juicio a terceros. Es decir, que en menos de 90 días, el nunca bien ponderado Sáenz de Tejada (su primer apellido es Ariza) pasó de cuestionar la bondad de Macías a retratarlo hoy como un dechado de lo que hace tres meses carecía. ¿Mentía entonces o miente ahora? Quienes le conocen bien dirían que en ambos casos. Nosotros no haremos tal cosa.
Añadía Sáenz de Tejada en su escrito al Comité de Garantías que, posteriormente, “la señora Carrillo también pasó a dar malos informes del señor Macías hasta que desesperado dimitió y pasó el acta a Miguel Ángel”.
A la vista de una personalidad tan proclive a los súbitos cambios, humildemente albergamos la esperanza de que el señor Sáenz de Tejada pase de considerarnos un panfleto a hacernos merecedor de un premio Pulitzer. Todo se andará.
A Pablo Saenz de Tejada, antes de tomarle declaración tendrían que hacerle un test de alcoholemia
Don Armando, se supera usted por días. Los dos artículos de hoy, la primera de las muchas dimisiones del COGEP y está de Pablito son buenísimos