Una mujer deja a su hijo de dos años orinado y mojado por la lluvia en un patio para ir al dentista en Elche
Efectivos de la Policía Local de Elche en una imagen difundida en sus redes sociales sobre el rescate del niño
Una madre ha sido detenida en Elche por dejar a su hijo de dos años encerrado en el patio de luces de una vivienda mojado por la lluvia y su propia orina, llorando solo debajo de una sombrilla, según han informado fuentes municipales sobre la intervención de la Policía Local. Está acusada de un presunto delito de abandono de un menor.
Ocurrió sobre las 12.00 horas del pasado 27 de noviembre cuando se recibió un aviso vecinal en el que se alertaba del llanto de un niño de corta edad durante cerca de una hora, una situación que llamó la atención por «anómala» a las personas que alertaron a la Policía.
Una Unidad Territorial de Policía Local se dirigió al lugar, donde pudo confirmar el lloro procedente de un patio de luces. Con la colaboración de una de las vecinas colindantes y la ayuda de una escalera comprobaron la presencia de un menor, de unos dos o tres años, que estaba en pijama, bajo una sombrilla de playa y sobre una colchoneta para mascotas, mojado por la reciente lluvia y su propia orina.
El niño se mostraba «claramente nervioso y tembloroso» por el frío, por lo que uno de los agentes accedió al patio para auxiliarlo. Debido a la corta edad del menor, no fue posible que explicara cómo había llegado allí y el motivo. El policía sacó al pequeño del lugar para ser atendido correctamente por la otra componente de la patrulla.
El agente que se encontraba en el patio trató de acceder a la vivienda para esclarecer lo sucedido y por si existiese un riesgo para terceras personas, pero se encontró la puerta de acceso y ventanas cerradas.
Hermano durmiendo
A través de una de las ventanas vio a un chico de 17 años durmiendo y, tras conseguir despertarlo, el joven les indicó que desconocía que su hermano se encontrara llorando y que ignoraba el paradero de su madre, mientras que suponía que su padre se encontraría trabajando. Igualmente se comprobó que la puerta de acceso al patio de luces estaba atrancada con muebles y las ventanas cerradas desde el interior.
Mientras la dotación policial se encontraba realizando gestiones para localizar a los padres de los menores, se personó en la vivienda la madre con otro de sus hijos. La mujer, que explicó que había acudido al dentista y desconocía qué había pasado, quedó detenida por un delito de abandono de menores.
El niño fue trasladado a un centro de salud para su valoración médica, que determinó que se encontraba en buen estado y posteriormente fue trasladado hasta el Hogar Provincial por una dotación de la Unidad de Menores y personas Vulnerables (UMEV) y el resto quedó al cargo de los abuelos.
Caso triste que se repetira cada dia mas a medida que nos vayamos “desespañolizando” y “europeizando”, los emigrantes de la decada de 1960 que volvian de Alemania contaban escandalizados que los bares nocturnos estaban llenos de madres solteras alemanas que dejaban a sus hijos atados en sus cunas.
Sin quitarle del todo la razón por el fondo, se escandalizarían de que estaban llenos de madres solteras, porque lo que es “atar” a al cuna o a la cama se ha hecho frecuentemente hasta bien entrados los 70, donde se sustituyo el cinturón o arnés por los parques aquellos que valían para endurecer la cabeza de los más ágiles, al parecer y que no recuerdo, yo tuve que volver a ser “atado” porque me saltaba el parque como un mono, para subir, se entiende, para bajar como plomo.