Débil con separatistas catalanes y bilduetarras, fuerte con Ayuso. Nada define mejor al Gobierno de Sánchez, que a través del Ministerio de Sanidad estudia la manera de gestionar en la Comunidad de Madrid la crisis de la covid-19 para controlar la situación. Decisión que estudia el Ministerio tras los desencuentros que en las últimas horas han protagonizado ambas administraciones públicas. Concretamente este viernes, cuando el titular de Sanidad, Salvador Illa, aconsejaba confinar la capital y los municipios con una incidencia de 500 casos por 100.000 habitantes, mientras la Comunidad de Madrid, a la misma hora en otra comparecencia de prensa, rechazaba esta vía.

Así las cosas y según afirman diferentes medios, el Gobierno de España da de plazo al Gobierno autonómico para que dé un paso atrás en sus políticas ejecutadas hasta ahora y dé por buenas las recomendaciones de la administración central.

De esta manera, el Ejecutivo de Pedro Sánchez busca dar un golpe de timón en el control de la epidemia que está castigando especialmente a la Comunidad madrileña, como ya sucediera durante la pasada primavera. Así las cosas, el Ministerio optaría por no esperar a que el equipo de Díaz Ayuso dé un paso atrás en sus medidas para controlar los rebrotes que crecen cada día en la capital de España y en otros municipios del territorio.

Esta decisión se estudia cuando ni siquiera ha pasado una semana desde que Pedro Sánchez y Díaz Ayuso se reunieran en la sede de la Comunidad de Madrid el lunes 21 de septiembre, con el objetivo de acercar posturas y explorar vías de colaboración entre ambas instituciones, tras meses de enfrentamientos, reproches y cruces de acusaciones.

Una reunión que, tan solo cinco días después, parece no haber quedado en nada, ya que incluso el principal acuerdo de la reunión, que fue la creación de un grupo covid, ha visto como el responsable asignado para esta tarea, el microbiólogo Emilio Bouza, ha tenido que dimitir este sábado como consecuencia de las discrepancias entre el Gobierno Central y la Comunidad de Madrid. Ni 48 horas ha estado Bouza en el puesto.

Pero esta decisión del Ministerio de Sanidad de “intervenir” Madrid no es fruto de la casualidad. Y es que durante la comparecencia del ministro Illa este viernes, contraprogramando al viceconsejero de Sanidad madrileño, Antonio Zapatero, parecía que la hoja de ruta estaba ya diseñada, ya que advirtió al Gobierno regional que las medidas que estaban adoptando para controlar el coronavirus eran insuficientes, siendo necesario el confinamiento de toda la capital, y no por zonas como se está haciendo hasta ahora.