Demagogia y estupidez
“En todos los siglos, los ejemplos más viles de la naturaleza humana se han encontrado en los demagogos”. Thomas Macaulay, historiador y poete inglés.
“Un estúpido es mucho más funesto que un malvado, Porque el malvado descansa algunas veces; el necio jamás”. Anatole France, premio Nobel de Literatura 1921.
El lenguaje es el medio del que nos servimos para manifestar nuestro pensamiento, lo malo es que también sirve para ocultar la verdad. Esto ha sucedido siempre, pero hoy se ha convertido en el deporte nacional; sobre todo en la política y en los medios de comunicación; de tal modo, que la verdad ha sido enterrada bajo el légamo fétido de la manipulación y la mentira. Esto no tendría importancia si los hombres de hoy amaran la verdad y a través de ese amor llegaran a conocerla y conociéndola expulsaran a la manipulación y la mentira. No es así. El hombre de hoy no se alimenta con la verdad; muy al contrario, bucea cada hora de cada día en las aguas pútridas de la mentira y de la llamada postverdad con la ayuda inestimable de unos aparatitos que se anuncian para servir al hombre, cuando la realidad es que es el hombre quien sirve a ellos. La manipulación y la mentira siempre han existido, pero nunca en la dimensión bárbara que ahora existe apoyada en las nuevas tecnologías.
La política, que basa sus mensajes en las mentiras, apoyándose en ella, hoy ha desorbitado la manipulación. La política ha sustituido a las religiones. Eran las religiones las que antes se ocupaban de suplantar a los conocimientos, hoy es la política. No solo los suplanta, quiere a toda costa eliminarlos porque no le interesa que los ciudadanos alcancen la inteligencia mediante el conocimiento, sino que sea la estupidez quien se instale en sus mentes Y es a partir de este momento cuando entramos a hablar de Estupidez y demagogia.
Qué duda cabe que a los políticos les interesa sobremanera unos ciudadanos necios, conformistas y gregarios. Que formen una sociedad dúctil y maleable o, en palabras del filósofo Zygmunt Bauman, una sociedad líquida y no sólida. Para ello la política utiliza la demagogia que es el asiento de la mentira, la manipulación y paradigma de la hipocresía. A la política le interesa una sociedad estúpida, mientras más estúpida más manejable, más aborregada, más fácil de conducir al redil.
Como ejemplo de estupidez reciente tenemos quienes, cegados por el brillo de unas promesas irrealizables, votaron partidos oportunistas que buscaban y buscan únicamente vivir de la política, no servir al ciudadano desde ella. Arnold Toynbee decía que las sociedades no mueren por asesinato, sino por suicidio. ¿Se está suicidando España por la estupidez de los españoles?
Esta claro que la educacion, fomenta , la mediocridad y en esas condiciones te encuentras solo ante el peligro . Y como decia un militante .- Ven al calor del partio por que fuera hace mucho frio . Vemos como a los alumnos se les endosan el doble de asignaturas , con objeto de hacer caja con los libros de texto . Cuando ya se conocen , metodos para hacer eficaz el estudio , ejemplo hacer resumenes , programar los repasos , establecer un calendario para repasar. Pues no se hace , y nadie lo exige , por desconocimiento .… Leer más »
La Filosofía, el amor a la verdad, en esta decadente sociedad no interesa.Pero si abandonamos la búsqueda de la verdad, estaremos a la intemperie, vulnerables a la letal contaminación de la posverdad, ese cínico disfraz de la mentira.
Ese rechazo a conocer la verdad nos impide ser libres. Y no ser libres es una forma atroz de suicidio.