Vista nocturna de la cárcel de Picassent en una foto de archivo.

El sindicato CSIF ha denunciado este miércoles que una funcionaria en prácticas vigila sola un módulo con 120 hombres en la cárcel valenciana de Picassent, y ha avisado del «riesgo» e «incumplimiento» de la normativa de seguridad.

Según ha denunciado la central sindical, esta circunstancia «se produce a pesar de que, por normativa, siempre tiene que haber una persona del mismo sexo de los reclusos en vigilancia en cada módulo y a que un funcionario en prácticas debe de ir acompañado«.

CSIF ha alertado del «riesgo» que supone esta situación para la seguridad de la trabajadora en prácticas y ha instado a Instituciones Penitenciarias a que adopte «medidas urgentes para subsanar esta cuestión».

El sindicato recalca que «ser funcionario en prácticas no significa tener que soportar decisiones injustas o arbitrarias». De acuerdo con sus cifras, el número de vacantes de funcionarios asciende a más de 3.000 en toda España, y en Picassent se acerca al centenar, por lo que reclama una Oferta Pública de Empleo extraordinaria que las cubra.

El sindicato, además, trasladó este martes una queja a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias en la que advertía de “la modificación unilateral de jornadas y horarios de funcionarios en prácticas y de carrera obviando lo previsto en la instrucción 3/2013, que prohíbe jornadas de 24 horas continuadas, unir las jornadas de dos cadencias seguidas y trabajar después del último turno de noche de la cadencia”.

La central sindical ha manifestado su «condena a la actual exigencia ilimitada de la administración penitenciaria a determinados funcionarios de un mayor número de horas de servicio o de jornadas de trabajo» y ha denunciado que se está “recortando el derecho a la conciliación de la vida familiar y laboral, se restringe el derecho a la libre circulación, se limita el derecho al descenso y se cercena la seguridad jurídica”.