Después de meses de calor, sol y playa, septiembre por fin ha llegado para instalarse en Europa. Con él llega el otoño y se anuncia ya la llegada de chaquetas, botas y paraguas, dejando los días de verano y vacaciones a nuestras espaldas. Pero la parte positiva es que si la temporada veraniega se termina en nuestro territorio significa que empieza en otro lugar, por lo que no todo está perdido para los amantes del sol y el buen tiempo. Hoy en día, viajar es más sencillo que nunca con el incremento de vuelos internacionales, que cada vez se han adaptado más a su clientela haciendo disminuir sus precios. De este modo, trasladarse a cualquier parte del mundo se ha vuelto mucho más económico que antaño.

Uno de los sitios turísticos preferidos de los fanáticos del mar y la playa es el Caribe. Es el destino fetiche por antonomasia, y es que sus aguas cristalinas y sus playas blancas no podían dictaminar lo contrario. Además, hay que sumarle una característica que dota al Caribe de un valor añadido: la posibilidad de alquilar un barco para descubrir toda la zona marítima de la manera más extraordinaria posible. Y todo gracias a la agencia de alquiler de barcos Nautal, líder en España.

Esta empresa creada en el año 2013 es la agencia de chárter náutico más importante del sector. Las cifras hablan por sí solas: Nautal cuenta con casi un millón y medio de usuarios al año – que ha supuesto un crecimiento anual del 250% en los últimos 3 años – y tiene a su disposición más de 23.000 embarcaciones. Este incremento se debe a la gran presencia internacional que ha desarrollado la agencia, que actualmente opera en 43 países repartidos por alrededor del globo terrestre: desde las Islas Baleares, pasando por Croacia y Grecia, y hasta América, donde destacan México, las Bahamas o Colombia, entre muchas otras zonas.

¿Por qué navegar por territorio caribeño es una buena idea?

La mejor manera de conocer un lugar es conocer sus rincones más emblemáticos y magníficos y en el Caribe, esos espacios no son ningún otro que el propio mar. Descubrir las islas caribeñas a bordo de un barco mientras se navega a la luz del sol es una experiencia inolvidable para cualquiera que la lleve a término. Vivir por unos días dentro de un barco es como sentirse hijo del salitre, pudiendo llegar a playas desiertas y escondidas como si se tratara de un tesoro pirata.

Este destino, y también esta experiencia náutica, es recomendable para cualquier tipo de público y va acorde a cualquier edad, lo único que va a variar será la manera en la que se vive la experiencia. Las condiciones de navegación en las playas del Caribe son ideales, por lo que surcar el mar será apto tanto para principiantes como para expertos. Además, las buenas condiciones meteorológicas y las altas temperaturas también son un llamado a hacer este tipo de viaje. Con temperaturas que llegan fácilmente a los 30 grados durante todo el año, las playas se convierten en un sueño a merced de todos los navegantes. ¿Puede ser mejor? Sí, porque el agua del mar está a unos 26 grados, facilitando el baño a cualquier hora de cualquier mes del año. Extraordinario.

La recomendación es obvia: alquila un barco en el Caribe y grábate en la memoria cada uno de los espacios que vas a conocer. La proximidad existente entre las islas del Caribe permite que puedas descubrir muchos paisajes y características particulares en pocos días. De este modo, en apenas unas horas vas a sentirte un auténtico explorador marítimo. Para hacerlo, no obstante, debes tener en cuenta el hecho de tener todos los trámites aduaneros correspondientes a la orden del día, si es que quieres pisar tierra firme, ya que en esta misma región cohabitan una serie de países distintos.

¿Cómo lo hago para alquilar un barco con la agencia Nautal?

Es muy sencillo, ya que Nautal se encarga de poner en contacto directamente a los usuarios con los propietarios de los barcos. La manera más práctica es acceder a la web de la agencia para hacer la búsqueda de la embarcación que más se asemeje a tus necesidades, así como el sitio donde queremos ir y la fecha en la que vamos a querer gozar de sus servicios.

Una vez escogido, se solicita un presupuesto, que Nautal hace llegar al propietario en cuestión para llegar a un acuerdo. Posteriormente, es la misma agencia quien requiere de la atención del cliente para transmitirle una respuesta y, en caso de haber llegado a buen puerto, este pueda hacer el pago del alquiler – en tarjeta de crédito o de débito, indiferentemente, por transferencia o por cobro telefónico. También todo lo que tiene que ver con las condiciones del alquiler. Además, Nautal no requiere de ninguna comisión cuando se reserva el barco.