Ignacio Cosidó junto a Dolors Montserrat, durante la rueda de prensa que ofrecieron

El PP aprovechará su holgada mayoría absoluta en el Senado para hacer oposición al Gobierno socialista y empieza estrechando el cerco sobre la titular de Justicia, a quien reprobarán en la Cámara Alta. Los populares censuran los «bandazos» de Dolores Delgado a la hora de defender al juez instructor del procés, Pablo Llarena, ante el acoso independentista y anuncian la inminente petición de interpelación a la ministra y su subsiguiente moción en la que quedará reprobada. Intentarán lo mismo en el Congreso, aunque allí no tienen asegurada la mayoría del Pleno.

La ministra se ha visto forzada a corregir su posición inicial ante la presión de las asociaciones de jueces y fiscales y la Abogacía del Estado asumirá la defensa del magistrado ante la demanda presentada por Carles Puigdemont en Bélgica contra él. El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha tenido que rectificar la posición del Gobierno y desde Santiago de Chile, donde se encuentra de viaje oficial, ha zanjado que la situación de Llarena «no es una cuestión privada, sino de Estado».

El PP cree que el giro del Ejecutivo era necesario pero insuficiente y exige «disculpas públicas» al magistrado del Tribunal Supremo, así como el cese inmediato de la ministra de Justicia por «sus mandatos».

El anuncio lo ha hecho la portavoz del PP en el Congreso, Dolors Montserrat, pero desde el Senado. Allí se han reunido esta mañana su dirección de grupo parlamentario con la de la Cámara Alta, liderada ahora por el senador Ignacio Cosidó. Los populares dejan claro que darán el máximo protagonismo al Senado, donde tienen mayoría absoluta, en su labor de oposición al PSOE. «Es un gobierno prepotente, son los líderes de la degeneración democrática», ha censurado Montserrat.

Una de las primeras medidas del grupo ha sido registrar una declaración institucional para que se defienda la «legitimidad democrática» del Senado, tras denunciar que desde el PSOE y el Gobierno se haya cuestionado su papel constitucional buscando un pacto con Podemos para eliminar su capacidad de veto a la tramitación de los Presupuestos. Esta prerrogativa fue aprobada por el Gobierno de Rajoy en la Ley de Estabilidad Presupuestaria y ahora el Ejecutivo ha anunciado que la reformará para evitar así el bloqueo del PP a sus cuentas.

El PP avisa también de que desde su mayoría en la Cámara Alta garantizarán que el PSOE y su suma con Podemos y los nacionalistas en el Congreso, echen al traste las reformas económicas impulsadas durante la etapa de Rajoy. «Esa mayoría en el Senado estará siempre vigilante», ha afirmado Cosidó.

Además, el PP registrará en los próximos días una proposición de Ley para reformar la ley de símbolos para preservar la neutralidad de los espacios públicos, así como la prohibición de otorgar indultos a los dirigentes que han impulsado el proceso separatista en Cataluña y un endurecimiento del Código Penal.