La carrera de Fernando Alonso en el Gran Premio de Bélgica apenas duró unos segundos. El español fue arrollado por Niko Hulkenberg antes de la primera curva y el impacto provocó que el McLaren saliera despedido por encima de Leclerc. Un brutal accidente sin consecuencias físicas, que dejó destrozado el monoplaza color papaya.

El error de Hulkenberg en la salida, demasiado osado el alemán, provocó el caos en la primera vuelta del Gran Premio de Bélgica. Hasta tres coches tuvieron que abandonar tras el incidente,que dejó a otros tantos monoplazas con problemas sobre la pista.

El más dañado de todos fue el McLaren Renault de Alonso que terminó literalmente destrozado tras volar por encima del Sauber de Leclerc, cuya carrera también terminó ahí. «Vi a Hulkenberg en los retrovisores con todas sus ruedas bloqueadas (por la frenada). No había manera de evitarlo. Lo positivo es que estamos todos bien», manifestó en declaraciones recogidas los micrófonos del Mundial de F1.