Imagen del tren descarrilado

Un tren que cubría la ruta Málaga-Sevilla, de media distancia 13901, ha descarrilado este miércoles por culpa del fango acumulado en la vía entre las estaciones de El Sorbito y Arahal, en el kilómetro 19. Aunque no ha llegado a volcar el convoy, el accidente ha provocado al menos 21 heridos, tres de ellos graves.

El suceso ha ocurrido a las 10.21 horas de este miércoles cuando se ha producido un fuerte impacto. Entre los heridos, según las primeras informaciones, hay al menos una persona con la cadera rota y otras fuertes golpes en la frente.

Hasta el lugar de los hechos se ha desplazado un helicóptero de Emergencias para atender a los afectados. La composición estaba formada por tres vagones, se los cuales el del centro es el que se ha llevado la peor parte, donde viajaban la mayoría de los heridos.

Joaquín, uno de los ocupantes del tren, viajaba en el vagón de cola y relata que «pasando unos 5 kilómetros de Arahal, se ha creado un arroyo artificial y el tren, que iba rápido, ha hecho aquaplaning y hemos salido volando».

De esta forma, explica que «durante unos 15 segundos que se me han hecho eternos, el convoy ha dado botes en un trayecto de 300 y 400 metros. Hasta las mesas han volado…».

La información que le han dado de momento a los ocupantes es que esta mañana se había cortado al tráfico la red y que se había reanudado poco tiempo antes del accidente. Así lo confirman fuentes de Renfe, que señalan que otro tren con salida de Sevilla las 7.40 horas con destino a Málaga se vio afectado por esta suspensión y ha sido detenido a la altura de Dos Hermanas debido a las condiciones meteorológicas adversas. Renfe ha realizado el trasbordo por carretera de los viajeros entre Dos Hermanas y Málaga.

Combustible por la zona

Estado de la vía del tren donde ha descarrilado el convoy

Los ocupantes han tenido que ser trasladados a otra zona debido a que se han roto todos los depósitos de combustible y había riesgo de explosión.

«Gracias a Dios no ha sido más grave aunque he visto gente con la cadera rota y contusionados», afirma Joaquín. Hasta la zona se han desplazado también varias ambulancias que no pueden acceder al lugar ya que se encuentra anegado de barro y es sólo accesible desde una vereda.

Otro testigo del suceso ha apuntado que los agricultores que trabajaban en la zona han sido los primeros en atender a los heridos, mientras han ido llegando los servicios de emergencia.

Asimismo, algunos testigos afirman que algunas ambulancias se han quedado atascadas y piden que a la zona se acerquen tractores para remolcarlas. No obstante, los heridos han tenido que andar hasta dos kilómetros para ser evacuados