El lanzamiento del cohete balístico estratégico de largo alcance Hwasong-12 (Mars-12) durante una prueba

“Corea del Norte ha disparado un proyectil no identificado esta tarde desde las inmediaciones de Pukchang, en la provincia Pyongan del Sur”, reza un comunicado de los jefes del Estado Mayor Conjunto.

El Ministerio de Defensa de Japón está analizando de urgencia la información sobre este lanzamiento norcoreano. Por el momento, se concluyó que el proyectil probablemente no alcanzó la zona económica exclusiva de Japón y que probablemente no se trata de un misil balístico de alcance intercontinental.

El Ejército de Corea del Sur estima que el misil voló unos 500 kilómetros en dirección al mar del Japón. A su vez, un funcionario de EE.UU. señaló que Corea del Norte lanzó “misil balístico de alcance medio”.

Posteriormente, la ministra de Defensa de Japón Tomomi Inada declaró que el misil cayó a 700 kilómetros de la prefectura japonesa de Akita y a 400 kilómetros de la prefectura de Shimane.

Tanto Japón como Corea del Sur han decidido convocar reuniones de los Consejos de Seguridad Nacionales de emergencia a raíz del lanzamiento del proyectil norcoreano.

El Gabinete de Japón afirmó que el lanzamiento del misil balístico de este domingo representa un peligro para los barcos y los aviones, y que es una clara violación de las resoluciones de la ONU.

Tensión en la península coreana

Miembros del Ejército Popular de Corea saludan a su líder Kim Jong-un, el 13 de mayo de 2017.

Pionyang lanzó un misil una semana atrás, el 14 de mayo. El lanzamiento se efectuó desde una zona en la vecindad de Kusong, en la provincia de Pyongan del Norte. Según el primer secretario del Gabinete de Japón, Yoshihide Suga, el misil norcoreano voló cerca de 800 kilómetros y cayó al mar del Japón. El vuelo duró unos 30 minutos y no alcanzó la zona económica exclusiva de Japón.

Desde hace unas semanas la península coreana vive una escalada de tensión debido a las últimas acciones emprendidas por la Administración estadounidense y la persistencia de Pionyang en seguir adelante con su programa nuclear.

La siempre difícil situación de la región ha empeorado aún más tras las maniobras militares a gran escala realizadas por EE.UU. y Corea del Sur, en respuesta a las cuales Pionyang hizo unas declaraciones en las que sostenía que no tiene miedo a una guerra contra Washington de la que no duda que saldrá victorioso, al mismo tiempo que amenazaba con “un ataque sorprendente y preventivo”.

En medio de la creciente tensión, Pionyang efectuó una prueba de un misil balístico el pasado 29 de abril, según militares surcoreanos y estadounidenses. Algunas de las versiones apuntan a que los norcoreanos lanzaron, sin éxito, un misil de medio alcance.