La policía intentaba este lunes contener con gases lacrimógenos el avance de una marcha en la principal autopista de Caracas, en la quinta protesta opositora en lo que va de abril contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro.

Como ocurrió en las anteriores manifestaciones, los opositores se concentraron desde temprano en un punto del este de la ciudad, en esta ocasión en la plaza Brion, y luego marcharon.

En las cercanías de la autopista Francisco Fajardo, agentes antimotines lanzaron desde un puente gases lacrimógenos para impedir el avance de los manifestantes, cuyo destino final no fue precisado por los organizadores de la protesta.

Jóvenes encapuchados rompieron andenes para sacar piedras, que luego lanzaban a los uniformados. Los gases también eran arrojados desde un edificio gubernamental.

Maduro, quien está en La Habana con motivo de una reunión de cancilleres de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), declaró feriado durante la Semana Santa para el sector público.

Se trata de la quinta jornada de protesta de la oposición en los últimos 10 días, para exigir elecciones generales, respeto a la autonomía del Parlamento, de mayoría opositora, y liberación de “presos políticos”.

Las anteriores manifestaciones dejaron un muerto y decenas de heridos y detenidos, así como daños en una sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y en el cuartel general del ex candidato presidencial opositor Henrique Capriles, a quien la Contraloría acaba de inhabilitar para ejercer cargos públicos durante 15 años.

El jefe de la bancada opositora del Parlamento, Stalin González, adelantó hoy a los medios que al final de la jornada de este lunes anunciarán el cronograma de actividades de la semana, a la vez que aseguró que “la gente va a seguir en la calle”.

La alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) también convocó para este lunes protestas en casi todos los estados del país.

Capriles denunció a través de su cuenta en Twitter que el gobierno había “restringido” varios accesos a Caracas para impedir la manifestación, una situación que ya ha sido criticada por los opositores en anteriores jornadas de manifestaciones.

El estatal Metro de Caracas, por su parte, indicó también en Twitter que cerró 18 estaciones y 19 rutas superficiales “en resguardo de usuarios, personal e instalaciones”. Pero los opositores denuncian que el régimen busca dejar a los manifestantes sin transporte.