El presidente iraní Hasan Rohani acusó el martes a Estados Unidos de haber “violado” sus compromisos y prometió una “reacción muy dura” de su país, tras la renovación en las últimas semanas de las sanciones norteamericanas por diez años.

Washington tendrá que “hacer frente a nuestra reacción muy dura” debido a esta “violación”, advirtió Rohani en un discurso en la universidad de Teherán.

“Estados Unidos (…) es nuestro enemigo, no tenemos dudas al respecto” afirmó.

Hay “consenso” en Irán al respecto y “no hay ninguna diferencia de opinión entre el gobierno, el Majlis (Parlamento) y el Guía” supremo Ali Jamenei, según el presidente Rohani.

Este tema de la “violación” estadounidense y la consecuente réplica iraní serán debatidos el miércoles entre el presidente Rohani y altos dirigentes iraníes.

El Senado estadounidense acaba de aprobar por 99 votos a cero la prolongación por diez años de sanciones que no están vinculadas al acuerdo sobre el programa nuclear iraní, suscrito en 2015 entre Irán y seis grandes potencias, entre ellas Estados Unidos.

La Cámara de representantes ya votó en noviembre esta prolongación y el texto debe ahora ser firmado por el presidente Barack Obama.

El actual régimen de sanciones -que afectan entre otros al sector bancario, y a las industrias de energía y defensa-, fue renovado cada diez años desde 1996, y terminaba a fines de este año.

Estados Unidos suspendió las sanciones antiiraníes vinculadas con el asunto nuclear pero impone otras relacionadas, según Washington, con derechos humanos y con el apoyo de Teherán al “terrorismo”, además de su programa de misiles balísticos.

No obstante, los expertos juristas consultados opinaron que la ley de sanciones es una herramienta importante para responsabilizar a Irán de cualquier violación del acuerdo nuclear y también como un baluarte contra eventuales agresiones de Teherán en Medio Oriente.